Hombre del volante gravemente herido
Proyectil se habría disparado desde el inmueble donde un grupo de efectivos bebía licor.
Trujillo. Todo comenzó el domingo por la tarde. Eran las 6:20 p.m cuando Richard Wilmer Alva Carrión de 43 años, regresaba a la casa de su suegra en la cuadra 1 de la calle Frankfort en Santa Isabel.
Iba a bordo del auto tico A4K-407 que a diario alquilaba para trabajar como taxista y apoyar económicamente a su familia.
“A esa hora mi esposo iba a recogerme a la casa de mi madre porque tenía que llevarme a un chifa de la avenida Mansiche, que es donde trabajo. Ya estaba llegando a la casa, estaba frente a la casa de mi mamá cuando le cayó el disparo”, cuenta la madre de su bebé de 1 año, Silvia Chávez.
“Hombres del orden” bajo sospecha
“Mi esposo me contó que lo único que alcanzó a ver fue a un grupo de gente en el tercer piso de la casa que queda en ese cruce, allí viven policías. Incluso me contó que uno de ellos bajó y al verlo con el pecho sangrante sólo repetía: “¡La fregaste, la fregaste!”, lo decía como dirigiéndose a uno de sus amigos, tal vez al autor del disparo”, evocó Silvia.
Al parecer, la vivienda que señalaba el taxista como el lugar donde salió el proyectil es la casa signada con el número 205 de la calle Frankfort, donde un grupo de policías alquila habitaciones.
Por su parte la fiscal de turno Cecilia Zavaleta Corcuera y el personal policial de la Oficina de Criminalística confirmaron que en la vivienda habían suboficiales de la PNP y civiles que habrían estado compartiendo bebidas alcohólicas.(la industria)
Iba a bordo del auto tico A4K-407 que a diario alquilaba para trabajar como taxista y apoyar económicamente a su familia.
“A esa hora mi esposo iba a recogerme a la casa de mi madre porque tenía que llevarme a un chifa de la avenida Mansiche, que es donde trabajo. Ya estaba llegando a la casa, estaba frente a la casa de mi mamá cuando le cayó el disparo”, cuenta la madre de su bebé de 1 año, Silvia Chávez.
“Hombres del orden” bajo sospecha
“Mi esposo me contó que lo único que alcanzó a ver fue a un grupo de gente en el tercer piso de la casa que queda en ese cruce, allí viven policías. Incluso me contó que uno de ellos bajó y al verlo con el pecho sangrante sólo repetía: “¡La fregaste, la fregaste!”, lo decía como dirigiéndose a uno de sus amigos, tal vez al autor del disparo”, evocó Silvia.
Al parecer, la vivienda que señalaba el taxista como el lugar donde salió el proyectil es la casa signada con el número 205 de la calle Frankfort, donde un grupo de policías alquila habitaciones.
Por su parte la fiscal de turno Cecilia Zavaleta Corcuera y el personal policial de la Oficina de Criminalística confirmaron que en la vivienda habían suboficiales de la PNP y civiles que habrían estado compartiendo bebidas alcohólicas.(la industria)