"Pescadores atentan contra los lobos marinos que buscan comida en sus redes". Carlos Bocanegra. biólogo pesquero
Las islas Guañape se ubican a dos horas viajando en bote desde Puerto Morín, ubicado en la provincia de Virú.
2 horas dura el viaje en bote para llegar a las Islas Guañape desde de Puerto Morín
El mar esconde secretos aparentemente insondables, portentos naturales provistos de fantasía y color que originan el natural asombro de quienes tienen la dicha de admirarlo.
Una de estas zonas paradisíacas forma parte de la provincia de Virú, situada al sur de la ciudad de Trujillo y se le conoce como las islas Guañape, calificadas por los especialistas como auténticas maravillas marinas y poseedoras de un impresionante y variado ecosistema.
Sin embargo, el hombre en su casi innato afán depredador pone en serio riesgo el dinamismo natural de las islas. Según el biólogo pesquero Carlos Bocanegra, no existe una política de prevención adecuada dirigida a un ecosistema diverso pero muy frágil.
Lobos marinos, aves guaneras, peces, moluscos y algas propias de zonas rocosas conforman la flora y fauna de Guañape, cuyo atractivo turístico parece crecer en relación inversa a las acciones de preservación de los entes gubernamentales.
Carlos Bocanegra muestra también su preocupación por la matanza a todas luces irracional de la que son víctimas los lobos marinos. Se ha detectado incluso que estos animales se ven obligados a buscar su alimento en las redes de los pescadores, quienes terminan atentando contra ellos por intentar defender su trabajo.
Hace unos años con un grupo de amigos interesados en la aventura iniciamos un corto viaje de 45 minutos desde Trujillo hasta Puerto Morín. Desde allí es necesario, alquilar un bote con dirección a las Islas Guañape.
Dos horas de un viaje intenso y reparador a nivel del mar sirven para resarcir cualquier destino averiado. El sol en lo alto, las aves alrededor y el azul de un cielo que se muestra limpio aún en estos tiempos de polución representan el bálsamo ideal para cualquier dolencia anímica.
Pero es más impactante todavía llegar a las islas y descubrir la infinidad de guanayes, lobos marinos que convierten al lugar en todo un manjar visual de innegable atractivo para los visitantes.
Las islas Guañape son un paraíso que el mar nos brinda sin reparos y que podríamos perder si mantenemos la obstinada y lamentablemente humana actitud de depredar nuestros tesoros naturales.
Por: Davinton Castillo (RPP)