" AÑO DEL BICENTENARIO, DE LA CONSOLIDACIÓN DE NUESTRA INDEPENDENCIA, Y DE LA CONMEMORACIÓN DE LAS HEROICAS BATALLAS DE JUNÍN Y AYACUCHO "

domingo, 31 de octubre de 2010

EL NUEVO RUMBO DEL “CENTRO HUAMACHUQUINO”


Por: Dionicio Mantilla León
“Trabajaremos para lograr un Huamachuco diferente. Ojalá que Dios permita que nuestra gestión se vea coronada por el éxito. De repente las obras que pensamos hacer sean muy ambiciosas, pero no hay peor gestión que la que no se hace”. La expresión de estas emotivas frases retumbaron en los amplios ambientes del auditórium “César Vallejo” de la UN.T. y el eco los devolvió tocando los corazones de los cientos de asistentes que unidos por un acendrado sentimiento huamachuquinista escuchaban a su joven dirigente, Juan Polo Huacacolqui, que acababa de juramentar como nuevo Presidente del Centro Huamachuquino” de residentes en Trujillo.
Aurolado por el honroso cargo de ser Coordinador en la Región La Libertad del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (P.N.U.D.), Juan Polo, asume la presidencia del “Centro Huamachuquino” prometiendo realizar una serie de obras orientadas a convertir a su institución en una entidad dinámica encuadrada dentro de los linderos señalados por la Ley 29363 que estipula su conversión en un Club Provincial, novísima norma que pretende otorgar un nuevo giro a los fines y objetivos de las tradicionales Asociaciones o “Colonias” de residentes en diversos provincias y distritos de nuestro país.
¿Será un Club Provincial o Distrital una entidad mucho más utilitaria para nuestras comunidades? ¿Cuál debe ser en realidad el rol que le compete cumplir a una institución de esta naturaleza?

ESCASA VINCULACION CON SU COMUNIDAD.-
Las asociaciones de residentes –comunmente denominados “colonias” - se constituyen principalmente en las grandes ciudades del país y obedecen a las mismas causas del fenómeno migratorio, esto es, tiene que ver con la búsqueda de mejores oportunidades de trabajo o mejores condiciones de vida. Se da al interno de nuestro país y también fuera de él conociéndose que las "colonias” peruanas en el extranjero albergan a aproximadamente 3 millones de miembros.
Surgidas, fundamentalmente, por estas causas las “asociaciones de residentes” desarrollaban acciones de variada índole: ayuda mutua, actividades sociales, religiosas y deportivas, pero con escasa y hasta nula vinculación con la realidad y la superación de los problemas y necesidades de su comunidad de origen, ni mucho menos con su desarrollo económico y social llevando adelante su actividad institucional sin mayor proyección sin comprender que ellas son parte intrínseca de sus comunidades de origen. De esta misma falencia ha venido adoleciendo la institución que agrupa a los huamachuquinos residentes en nuestra ciudad.
Esta situación funcional irregular se pretende corregir con la dación de la Ley 29363 y su Reglamento el D.S. 059-2010 que amplía sus fines y objetivos e incluso señala determinadas facilidades y exoneraciones tributarias a ser otorgadas por las municipalidades con el propósito de un mejor cumplimiento de dichos fines a favor de sus comunidades los que tienen que ver con la consolidación de la identidad nacional, la identificación y evaluación de los problemas de su jurisdicción, la integración de sus miembros a través de actividades de diversa índole, la promoción del turismo comunal y, como es lógico, “expresar y representar los intereses de sus respectivos pueblos de origen”.
Así las cosas, los nuevos cuadros directivos el “Centro Huamachuquino” de residentes en Trujillo tienen el compromiso de orientar su labor institucional de acuerdo a lo señalado por la normatividad vigente constituyéndose entonces como “Club Provincial Sánchez Carrión” y llevando a la práctica el Plan de Trabajo estructurado previamente, el que necesariamente debe estar orientado a contribuir al logro del desarrollo de su comunidad de origen.
Si bien es cierto la Ley 29363 cubre una neurálgica y evidente omisión funcional en estas importantes instituciones nada será posible hacer realidad si en el cumplimiento de sus fines y objetivos no se incluye, de parte de quienes la dirigen, una gran dosis de responsabilidad y sobre todo el amor y gratitud al pueblo que los viera nacer. Nuestra enhorabuena y nuestros mejores augurios de éxito a la flamante plana directiva del “Centro Huamachuquino”.