Frontera. Una hora toma para llegar a Arica de Tacna. Entre ambas ciudades fronterizas no solo hay una cercanía territorial, sino una relación histórica, económica y de amistad. A pocos días de conocerse el veredicto de la Corte de La Haya esta crónica les toma el pulso a ambos lados. Lo que decida la justicia internacional no cambiará el espíritu de integración que se siente en el centro de la Ciudad Heroica.
Luz Elena Vega Nieto.
Desde Tacna y Arica.
La mañana del último jueves, decenas de pequeñas embarcaciones se hacían a la mar desde el muelle de Arica. El sol quemaba las cabezas de viejos pescadores chilenos, quienes soportaban una temperatura que bordeaba los 30 °C. Un grupo de ellos nos ha invitado a dar unas vueltas en la lancha Arica I. Es inevitable no conocer sus expectativas sobre el fallo de La Haya, cuyo contenido se conocerá el próximo lunes 27. Ellos saben que la decisión podría afectarlos. Si la Corte Internacional acepta la demanda peruana, el trazado bisectriz, los pescadores chilenos tendrían menos área marítima para sus faenas. Sin embargo, éstos esperan con tranquilidad, como las aguas mansas del Pacífico que recorremos en la Arica I y que siempre fueron fuente de problemas.
En esta ciudad chilena hay doce pescadores peruanos retenidos con sus embarcaciones. La Autoridad Marítima de Chile les impuso multas que equivalen entre S/. 60 mil y S/. 90 mil por ingresar a lo que hoy los chilenos reconocen como su mar y que para Perú resulta un área de controversia. Los infractores sufren, no tienen dinero para pagar la multa. Algunos no han regresado a casa hace ocho meses. Sus colegas chilenos tratan de ayudarlos.
José Peñaloza Quiroz, secretario del Sindicato de Pescadores Artesanales de Arica, señala que los peruanos son albergados en el local del sindicato. Les dan trabajo en faenas de pesca, de esa forma subsisten y juntan para el pago de la infracción.
“Hubo épocas que teníamos albergados hasta 40 peruanos. Les proporcionamos algún tipo de trabajo en el que pueden sacar, al cambio, entre 50 ó 60 soles diarios y si se ponen a pescar aquí en el mismo puerto hasta 300 soles”, indica.
Lo dicho por Peñaloza lo ratifica nuestro compatriota Amir Cruz Laurente (31). Este pescador peruano partió del puerto moqueguano de Ilo hace dos meses. Asegura que la corriente lo puso en el territorio en conflicto, por lo cual fue detenido por la autoridad marítima de Chile.
“Ellos (por los pescadores chilenos) siempre nos dicen que nosotros no estamos aquí por robar ni por matar, sino que fuimos detenidos trabajando”, expresa.
Por eso, pescadores chilenos y peruanos esperan que el fallo ponga fin al conflicto. José Peñaloza plantea a ambos gobiernos un nuevo tratado de pesca que dé facilidades a los artesanales para que puedan pescar en ambos lados. Eso –a su criterio– pondría fin a las detenciones. “Tendríamos que regular las vedas, tallas mínimas y cosas como esas pero al final sería lo más beneficioso para todos”, asegura.
Modesto Morbeli, otro pescador peruano retenido en Arica hace meses, respalda la propuesta del dirigente chileno. Para ellos, en el tema de mar y pesca artesanal, no debe existir la frontera.
ARICA SIN la HAYA
Al mediodía, las calles del centro, ubicadas al pie del histórico morro, donde el 7 de junio de 1880 se dio la batalla de Arica que inmortalizó a Francisco Bolognesi, lucen congestionadas de carros y peatones. Los periódicos no dedican sus primeras planas a lo que sucederá el 27 de enero.
La actualidad política nacional acapara los titulares. El término de la gestión del presidente Piñera y las entregas de informes de sus representantes en las intendencias predominan en el menú periodístico.
El alcalde de Arica, Salvador Urrutia, no cree que el fallo altere la relación entre su ciudad y Tacna. Según Urrutia ambas ciudades se retroalimentan, pues tienen una relación económica y comercial muy estrecha.
El burgomaestre asegura que su país no piensa tomar ninguna represalia si la decisión de La Haya los desfavorece. En ese escenario, el gobierno chileno está tomando previsiones para compensar a la pesca, el sector más afectado.
En tanto, el intendente de la región Arica y Parinacota, José Durana, la máxima autoridad política de esta parte de Chile, aclara que la posición de su país, de respeto a la justicia internacional, ya fue fijada por el presidente Sebastián Piñera. A autoridades y políticos no les queda más que pararse tras su mandatario.
Chilenos en tacna
Pasada la una de la tarde, de retorno al Perú, hay una fila de autos y buses en los controles fronterizos de Chacalluta y Santa Rosa.
Los fines de semana son 20 mil turistas que cruzan la frontera y los días de semana cerca de 15 mil, dice el jefe de la oficina de Migraciones de Tacna, Carlos Núñez. La mayoría son chilenos que arriban a la Ciudad Heroica. Algunos llegan solo para almorzar. No solo los atrae la sazón de la comida peruana, también sus precios.
Los controles de ambos países demoran de acuerdo a la cola, entre media hora y 45 minutos. Hace tres años se planteó la idea de un solo control para reducir el tiempo a la mitad. Los Congresos de ambos países ya lo aprobaron y este debe implementarse a mediados de año. El último ejercicio se ha previsto para abril.
“No hay disminución en el ingreso de turistas chilenos. La actividad es normal y así seguirá. Es más, la coordinación con nuestros pares de Chile ahora está más estrecha porque estamos preparando un ejercicio de control integrado para el mes de abril”, señala Núñez.
Es hora de almuerzo en Tacna y a Luis Batallanos le faltan manos para despachar los platillos en su restaurante, ubicado en el segundo piso del mercado central, en pleno corazón de la Ciudad Heroica. Sus clientes son, en su mayoría, chilenos.
Mientras atiende presuroso, le consultamos si cree que el próximo fallo de La Haya afectará la relación entre Tacna y Arica, y si podría perjudicar su negocio.
“No. Eso no afectará nada la relación que tenemos con los chilenos; aquí tienen buena comida, atención médica y cientos de productos a menor precio que al otro lado, eso no lo van a cambiar”, responde.
Unos puestos más allá, dos jóvenes chilenas toman un jugo. Hacen una pausa, pues todo el día estuvieron de compras por las galerías de la ciudad. Patricia Cavieres cuenta que viene a Tacna una vez al mes para abastecerse de mercadería que comercializa en Arica.
“A nosotros nos conviene venir aquí por muchas razones y a los tacneños también. Dejamos mucho dinero en salud, comercio, comida. Es un desarrollo mutuo”, señala.
US$ 1.8 MILLONES AL DÍA
Los chilenos inyectan mucha plata en Tacna. Según la Dirección Regional de Turismo, un visitante sureño puede gastar US$ 100 diarios en diversos rubros. Gastronomía, servicios médicos y ropa son los más demandados. Por día el aporte puede sobrepasar los US$ 1.8 millones.
Y es que el cambio de la moneda les favorece, pues un sol peruano se canjea por 188 pesos. El sueldo mínimo chileno asciende a 210 mil pesos –equivale a 1,117 soles–, es decir, más de un sueldo y medio mínimo de Perú, lo que obviamente eleva su capacidad adquisitiva.
Estamos en las galerías de la avenida Bolognesi. Ahí los chilenos compran prendas de vestir por cantidades. Destacan la calidad de los materiales, los buenos acabados y bajos precios.
En los puestos dedicados a la venta de artículos deportivos no solo se encuentran camisetas de Alianza Lima o de Universitario, también de Colo Colo o la U de Chile. Lo mismo ocurre en la época escolar, en la que los uniformes que más se ofertan son los de los liceos chilenos y no de las instituciones educativas de Tacna.
Según el presidente de la Cámara de Comercio y Turismo de Tacna, Aldo Fúster, la relación económica tejida entre Tacna y Arica siempre fue complementaria. En las peores épocas de la economía peruana, eran los tacneños los que cruzaban la frontera para adquirir productos a menores precios. Azúcar, arroz, aceite y hasta pan llegaban a través del ferrocarril o en colectivos que desembarcaban en el terminal terrestre.
Con los años el panorama se invirtió y ahora los chilenos dejan su dinero en Tacna. Así, con esta estrecha relación, la mayoría considera que los lazos no se quebrarán cuando se culmine la lectura del fallo, la mañana del próximo lunes 27.
Tacna izará banderas blancas
La población de Tacna programó una serie de actividades para recibir el fallo el 27 de enero. La Benemérita Sociedad de Señoras de Tacna, Pro Marina y algunas otras instituciones de la sociedad civil anunciaron que recibirán la resolución en el Teatro Municipal de Tacna.
La propuesta del embanderamiento de la ciudad aún no es aprobada por la mayoría. Solo los alcaldes de los centros poblados La Yarada y Los Palos, ubicados en la parte baja de la ciudad, cerca de la frontera, anunciaron que izarán la bandera en sus viviendas. Sin embargo, también se anunció que se izarán banderas blancas en señal de la paz que debe existir entre ambos países.
La congresista Natalie Condori propuso la declaratoria de feriado para el día en que se reciba el fallo, sin embargo, la idea no fue respaldada por la autoridad regional ni las provinciales, por lo que ese día las actividades se desarrollarán con normalidad.
Claves
La demanda ante la Corte Internacional de La Haya por el diferendo marítimo fue planteada por Perú el 16 de marzo del 2008. Desde esa fecha hasta la actualidad los gobiernos de ambos países mantuvieron la posición de respetar el veredicto que emita el ente supranacional.
En la etapa de alegatos orales, en la cual los equipos jurídicos de Perú y Chile pusieron las cartas sobre la mesa, no existió clima de conflicto entre las poblaciones de Tacna y Arica.
Recientemente, los alcaldes de ambas comunas, Salvador Urrutia y Fidel Carita, suscribieron una declaración de hermandad mediante la cual se ratificaron los lazos de buena vecindad entre ambos pueblos.