
EFE
El sacerdote Fernando Karadima, considerado por el Vaticano culpable de cometer abusos sexuales y condenado a una vida de oración y penitencia, fue interrogado por la justicia chilena en el marco de una demanda en contra del Arzobispo de Santiago, donde volvió a negar la existencia de abusos sexuales.
Tras más de dos horas de interrogatorio, el religioso salió del Palacio de Tribunales escoltado por cuatro guardaespaldas que golpearon a la prensa, sin entregar declaraciones a la prensa.
Karadima fue interpelado por el juez Juan Manuel Muñoz, en calidad de testigo, en el marco de la demanda civil contra el Arzobispado de Santiago por presuntos actos de encubrimiento de obispos en materia de abuso sexual.(la república)