Por: Beto Mendoza
Para nadie es sorpresa hablar del caos que se vive en el transporte urbano y rural en Huamachuco. Lo que mas resalta de este problema es la queja de los pobladores sobre el servicio de mototaxis que ya se conocen las deficiencias y maltratos que cometen los conductores: manejan menores de edad, algunos van acompañados en el volante, al interior malos olores, demasiado volumen en los parlantes, parabrisas cubiertas con calcomanías que impiden ver al conductor y pasajero, corren demasiado, mototaxis sin puertas, se quedan con los equipajes, cobran demasiado a lugares cercanos, no ayudan a subir o bajar los equipajes, hablan palabras soeces. Se detectaron casos de robos y asaltos por mototaxistas. Claro hay conductores que se merecen el respeto y tratan bien a los usuarios.
Al preguntarle a los mototaxistas que problemas tienen, lo primero, que no lo comparto, es quejarse de los inspectores de tránsito, que dicen los fastidian a cada rato, luego de los conductores de camionetas, autos y vehículos pesados que les cierran el pase y no transitan adecuadamente, a la policía de tránsito, no lo nombran porque no lo ven. Indican que se a mejorado el estado de las pistas pero todavía falta.
El otro día un joven mototaxista decía que él no se puede ubicar detrás de una moto lineal, porque a su criterio, este vehículo debe ir por la derecha, es por eso que en plena marcha intentó pasarlo, no percatándose que en sentido contrario en el pasaje hospital, venía un vehículo pesado. Gracias a Dios no ocurrió nada. Haciendo un resumen, desconocen las normas de tránsito.
Los conductores de otros vehículos como camionetas, vehículos pesados, motos lineales y hasta de triciclos de carga, responsabilizan a los mototaxistas de todo este desorden, se meten contra el tráfico, por ser pequeños dan vuelta en U, se pasan los semáforos, etc.
¿Qué hacer con este problema? Conocemos que la responsabilidad es de las autoridades como la policía de tránsito y el área de transportes de la municipalidad, pero también de nosotros, que pocos o muchos, no decimos nada cuando dan mal servicio, nos quedamos callados.
Alguien decía que los candidatos a la municipalidad provincial de Sánchez Carrión deberían haber caminado a pie o tomar el servicio de mototaxi para darse cuenta del problema. Siempre se les ha visto, a los 4 primeros en camioneta, expresaron.
Desconocemos por qué se autorizó tantas licencias de conducir para mototaxistas, que ahora vemos a muchos de ellos que son propietarios de las motos, ubicados en el mercado de abastos porque ya no hay negocio y otros ya lo están vendiendo. En conclusión, hay demasiados vehículos de mototaxis que ya ocasionan problemas. Pareciera que hubo negociado en la entrega de licencias entre la municipalidad y una clínica particular para ganarse alguito porque el examen médico lo hacía hasta una técnica en enfermería.
Se ha incrementado la venta y compra de motos lineales, mayormente chinas, a las cuales tienen acceso jóvenes de la zona urbana y rural que no cuentan con la licencia y placa del vehículo y en cada fiesta popular se observa decenas de estas motos estacionadas, siendo un peligro para ellos y los transeúntes por manejar en estado etílico.
En el terminal terrestre mal acondicionado de la avenida 10 de julio, falta orden, se quiso hacer, pero los dirigentes gritaron a los 4 vientos y el resultado, mal servicio. No se controla la salida y mantenimiento de los vehículos. Recordemos que varias personas perdieron la vida por fallas mecánicas de las combis, camionetas, camiones y la irresponsabilidad de sus conductores. Los otros terminales ya están pasando por lo mismo.
Ya se tiene el servicio de combis en la ciudad que van ganando pasajeros cada día, aunque faltan unidades, pero se debe controlar y no sea otro problema mas adelante.
Otro dolor de cabeza es el transporte informal interprovincial de combis y mini vans que no cuentan con la licencia como transporte de pasajeros, solo de servicio turístico. Ya han ocasionado accidentes por la excesiva velocidad y cansancio de los conductores que se exceden en varios viajes ida y vuelta a Trujillo. Es responsabilidad del gobierno regional solucionar este problema.
No todo es malo, hay conductores que brindan un buen servicio y bajo responsabilidad. Es imposible tener una ciudad maravilla en el tránsito como algunos sueñan, pero si todos colaboramos, poco a poco, vamos a mejorarlo. Es cierto que ganarse la vida como conductor es positivo, pero no se puede exagerar en demasiadas mototaxis, porque regular el número de vehículos permite tener un mejor orden y control vehicular.
Los vecinos tienen derecho a la tranquilidad y respeto a sus viviendas. Las llamadas cocheras públicas como avenidas y ciertas calles, están llenas de vehículos menores y pesados que a nadie hacen caso, que de hecho se convierten en mecánicas ambulantes.
Se ha incrementado la venta y compra de motos lineales, mayormente chinas, a las cuales tienen acceso jóvenes de la zona urbana y rural que no cuentan con la licencia y placa del vehículo y en cada fiesta popular se observa decenas de estas motos estacionadas, siendo un peligro para ellos y los transeúntes por manejar en estado etílico.
En el terminal terrestre mal acondicionado de la avenida 10 de julio, falta orden, se quiso hacer, pero los dirigentes gritaron a los 4 vientos y el resultado, mal servicio. No se controla la salida y mantenimiento de los vehículos. Recordemos que varias personas perdieron la vida por fallas mecánicas de las combis, camionetas, camiones y la irresponsabilidad de sus conductores. Los otros terminales ya están pasando por lo mismo.
Ya se tiene el servicio de combis en la ciudad que van ganando pasajeros cada día, aunque faltan unidades, pero se debe controlar y no sea otro problema mas adelante.
Otro dolor de cabeza es el transporte informal interprovincial de combis y mini vans que no cuentan con la licencia como transporte de pasajeros, solo de servicio turístico. Ya han ocasionado accidentes por la excesiva velocidad y cansancio de los conductores que se exceden en varios viajes ida y vuelta a Trujillo. Es responsabilidad del gobierno regional solucionar este problema.
No todo es malo, hay conductores que brindan un buen servicio y bajo responsabilidad. Es imposible tener una ciudad maravilla en el tránsito como algunos sueñan, pero si todos colaboramos, poco a poco, vamos a mejorarlo. Es cierto que ganarse la vida como conductor es positivo, pero no se puede exagerar en demasiadas mototaxis, porque regular el número de vehículos permite tener un mejor orden y control vehicular.
Los vecinos tienen derecho a la tranquilidad y respeto a sus viviendas. Las llamadas cocheras públicas como avenidas y ciertas calles, están llenas de vehículos menores y pesados que a nadie hacen caso, que de hecho se convierten en mecánicas ambulantes.
En estos 2 meses que queda de gestión del alcalde Luis Rebaza Chávez, a poner mano dura en el ordenamiento del tránsito y exigir a través de las autoridades competentes como gobernación, ministerio público, policía nacional, policía de tránsito y municipalidad provincial, se trabaje coordinadamente; sin dejar de lado la próxima gestión del alcalde Arturo Rebaza López, quien ya debe tomar cartas en el asunto, con proyectos y estrategias de mejoramiento y ordenamiento poblacional.