Por: Dionicio Mantilla León
Ha concluido el proceso electoral y el pueblo ha decidido quien será su
próximo gobernante regional y local a partir del 1 de enero del 2015. Para unos,
algunas decisiones han sido acertadas y para otros, equivocadas, pero, al fin y
al cabo, han sido actos legitimados por el derecho democrático de elegir y ser
elegido.
A nivel regional, el
pueblo ha dicho: No al atraso y sí al desarrollo. Perdió el Ing. José Murgia,
del partido aprista y ganó el Ing. César
Acuña, de Alianza para el Progreso. El triunfo del Ing. Acuña se espera
signifique el inicio de un ciclo de intensa labor en el que se hagan realidad las
obras de envergadura que la región anhela; sin embargo, la derrota del Ing. Murgia
no significa, honesto es reconocerlo, desconocer la pasión que este político ha
puesto durante sus dos períodos gubernativos al frente de la Presidencia
Regional los mismos que han dejado huellas de obras muy importantes.
A
nivel local, un variopinto conjunto de movimientos locales y regionales han
logrado ganar la confianza popular en desmedro de los partidos tradicionales
dando lugar así a la aparición de un nuevo mapa político en donde la relativamente
joven agrupación política, APP, destaca nítidamente seguida de otra, también políticamente
joven: Restauración Nacional, brillando por su ausencia el Movimiento Regional
SÚMATE que tuvo la infeliz idea de aliarse con el movimiento Nueva Libertad, alianza
que por poco lo hace desaparecer. En este proceso electoral también casi
desaparecen el partido aprista y al MICOEE.
A nivel de gobiernos locales
nuestra atención se concentra en la provincia de Trujillo y en nuestra Provincia.
En la primera, el “Movimiento para el Desarrollo con Seguridad y Honradez” que
lidera, Elidio Espinoza, superó, con un ajustado margen de un punto porcentual,
al Ing. Manuel Llempén, de Alianza para el Progreso. Un resultado que pone
frente a frente dos posiciones antagónicas: la experiencia policial, por un
lado, y , la experiencia gerencial, por el otro. Resultado no tan sorpresivo
por cuanto la sicosis por el clima de inseguridad que vive la población
trujillana desde hace varios años hacía preveer se impondría el ex policía a
quien se le atribuye el asesinato de 4 avezados delincuentes.
Un hecho judicializado que aún no recibe
sentencia condenatoria, pero que le ha permitido encumbrarse mediáticamente y
ser el referente de la aspiración de la
clase media y adinerada de Trujillo, víctimas frecuentes de extorsionadores y
sicarios quienes no han dudado en apoyarlo con su voto, “La cosa_ dicen_ es
acabar con la lacra delincuencial” sin importarles que el Movimiento de Elidio
cuente o no con experiencia gerencial, propuestas de desarrollo comunal ni con
los cuadros técnicos para hacerlo
realidad convirtiéndose así en gran preocupación el futuro manejo gerencial de
la ciudad dando la sensación de haber elegido un comisario y no un Alcalde. Algo más, ¿Y qué pasaría si el Poder Judicial lo
encuentra culpable de asesinato múltiple?
En cuanto a nuestra provincia el triunfo de APP es contundente con un
mapa político que dibuja este orden: APP, SÚMATE, Fuerza Popular, como las
principales fuerzas políticas de la provincia. Un escenario en el que figuraron
como líderes: Arturo Rebaza, Luis Rebaza y Carlos Loyola, respectivamente, y en
el que resultó electo como nuevo Alcalde huamachuquino el primero de ellos. A esto
se agrega que en todos los municipios distritales se impuso APP con la
excepción de la comuna de Cochorco en donde ganó el candidato de SÚMATE.
Ahora bien, pese a conocerse determinados cuestionamientos hechos a la
hoja de vida del candidato provincial de APP el pueblo lo eligió como nueva
autoridad edil huamachuquina, una decisión que debe ser respetada esperando que
su desempeño gubernativo sea el mejor en beneficio de la comunidad. De otro
lado, el talón de Aquiles del candidato de SúMATE, Luis Rebaza Chávez, se
afirma estuvo en la no solución de añejos problemas comunales destacando, eso
sí, la dedicación, casi exclusiva, al quehacer educativo hecho que fue
reconocido, incluso, por las autoridades del Ministerio de Educación y la
totalidad de docentes.
Lo que llama la atención es la extraña actitud de parte de las
agrupaciones políticas perdedoras a nivel regional que vienen solicitando la
anulación de las elecciones argumentando un presunto fraude pedido que es
rechazado por las autoridades de la ONPE. Por supuesto que no nos referimos a
lo acontecido en algunos distritos de Santiago de Chuco tema puntual a ser
atendido por el JEE de Huamachuco.
En estas circunstancias,
exhortamos a la ciudadanía de los pueblos del ande liberteño a respetar los
resultados de las elecciones del 5 de octubre pues, nos gusten o no, ha sido una
decisión del magno soberano de la democracia como es el pueblo.