Por: Dionicio Mantilla León
A escasos 11
meses de celebrar este magno acontecimiento el Congreso de la República gestado
por el Libertador José de San Martín, con la participación de probos tribunos
como José Faustino Sánchez Carrión, dio una muestra de inconciencia al negarle
el voto de investidura al nuevo Premier, Pedro Cateriano, provocando una grave
crisis política y un fuerte golpe a la
gobernabilidad. Negativa de voto de confianza, que si bien es una atribución
constitucional del Congreso debe ser analizada seriamente el contexto que
vivimos y poniendo por encima de todo el interés del país. Que el Presidente del Congreso de la
República invite a dialogar al Premier
para informarle que el voto de investidura de su cargo estaba condicionado a
sacar a tres ministros de su gabinete, sobre todo al Ministro de Educación,
Martín Benavides, constituyó un despropósito
inconcebible a sabiendas de que si no les satisfacía el actuar de los ministros
observados podrían después interpelarlos y eventualmente censurarlos. Pese a
esta amenaza el Presidente Vizcarra ha dicho que “La SUNEDU seguirá y la
reforma universitaria no será materia de negociación”
La desaprobación al Premier ya
se sabía días antes así que afirmar que su presentación no satisfizo argumentando
de que: “Dijo que la minería es lo más importante” o “habló poco de la pandemia”
fue sólo pretexto. Un actuar así es censurable y chocante con el espíritu de la
democracia.
Asimismo, decir que el gobierno y la prensa
debilitan al Parlamento cuando se afirma que existen intereses subalternos, es
falso. Todos conocemos que es el mismo Congreso el que se auto debilita con sus
frecuentes “patinadas”. Verbigracia: Omar Chehade al presentar a última hora un
dictamen sustituto sin respetar las normas constitucionales, el intento de fortalecer
la inmunidad parlamentaria eliminando la de otras entidades estructurales del
Estado, la recomendación de congresistas de Podemos de auto medicarse al margen
de las normas señaladas por el MINSA, las groserías del congresista Joseph
Mimbela, la iniciativa de condonar las deudas bancarias, que el Presidente de la
Comisión de Ética, haga el ridículo dirigiéndose a él mismo un oficio
retractándose en el tema del bono de instalación en Lima, la lucha contra la
SUNEDU por congresistas vinculadas a las universidades privadas no licenciadas,
y mucho más.
¿Y quién sale ganando de esta pugna? Los
partidos que votaron a favor de la investidura: Fuerza Popular, Morado y Somos
Perú. ¿Y quiénes han contribuido para el alza de los bonos políticos de estas
agrupaciones? Los que votaron en contra: AP, APP, Morado, Frente Amplio y
FREPAP. Los ciudadanos observamos y evaluamos comportamientos. Abril del 2021
está cerca y el Perú requiere de partidos solventes pero además de un líder
capaz, honesto, sin problemas judiciales, valiente y con visión de país. ¿Existe
este líder? Por supuesto que si y Ud. lo conoce.
De otro lado, hoy tenemos nuevo Premier, Wálter Martos, y un gabinete remozado. Esperamos
que ahora prime la cordura. Por el bien del país creemos que es hora de fortalecer
la gobernabilidad deponiendo intereses subalternos. El escenario dramático en
que hoy vivimos demanda responsabilidad de parte de los gobernantes principalmente del Parlamento el cual debe legislar
de acuerdo al interés nacional. Y de parte del Ejecutivo, poner más empeño en el combate a la
pandemia que viene asolando a la población, reactive la economía favoreciendo a
las grandes y pequeñas empresas; promover la formalización del 70% que aun falta,
fomentar la minería, el agro y la industria, entre otras acciones más.
Oportuno es poner en agenda, las
propuestas hechas por el Presidente de la República en el Pacto Perú: Reforma Política,
Reforma Judicial, Sistema Único de Salud, Sistema Único de Pensiones, Crecimiento
económico, el mejoramiento de la educación, las cuales nos permitirán arribar a
un Bicentenario de la Independencia Nacional en mejores condiciones de vida.
