Pese a que este 31 de diciembre el clima no era favorable, los huamachuquinos se prepararon a despedir el año viejo y recibir el nuevo 2024. Desde la mañana se veía en el mercado la compra de alimentos, ropa amarilla, bebidas y también regalos.
Pasada la lluvia en la noche, la Plaza de Armas fue nuevamente escenario para pasear, conversar y tomarse las fotos , retornar a casa, compartir la cena y celebrar.
La costumbre de quemar muñecos, pese a la prohibición municipal, se vivió en cada cuadra de las calles con música, baile y brindis. Se rescata ya no mucho el uso de pirotécnicos como años anteriores aunque los niños no dejaron de quemarlos.
La curiosidad en al elaboración de los muñecos destacó un dinosaurio gigante elaborado por la familia Cruz Cosme en la calle Serpiente de Oro cerca al puente grande. También se quemó muñecos alusivos a la presidenta Dina Boluarte, cutulitas, el alcalde Santos Ruiz, entre otros.