sábado, 6 de julio de 2024

Maestro: Discípulo de Cristo

MI SINCERA FELICITACIÓN A LOS BUENOS MAESTROS DE MI QUERIDO HUAMACHUCO  

Por: Dionicio Mantilla León 

Es 6 de julio del 2024 y las campanas de los templos del saber comienzan a tañer con mayor fuerza y alegría, mientras en los jardines escolares las flores exhalan sus exquisitas fragancias y colocan sus mejores trajes, y .en las aulas los niños y los jóvenes dibujan en sus rostros sus más hermosas y tiernas sonrisas de gratitud. Y es que hoy la Patria peruana celebra un día muy especial. Sí, ha llegado el día de rendir homenaje al Maestro. A su majestad el digno maestro peruano.

¿Quién en el transcurrir de su existencia no ha poseído alguna vez algo muy preciado considerado como una joya o un tesoro digno de admiración?¿Una joya o tesoro del cual no quisiéramos desprendernos, vender o regalar? ¿Quién en un incomparable gesto de generosidad y altruismo puede ser capaz de entregar su tesoro a los demás? ¿Quién en suma puede convertirse en un émulo y discípulo del gran maestro de maestros, Jesús el Cristo nuestro amado Salvador? El hijo de Dios que fue capaz de compartir con amor la sabiduría de su doctrina?

Es entonces que nuestra mente y corazón responden al unísono: Sí, existe en el mundo y en la Patria Peruana un personaje, hombre o mujer, que nutridos de generosidad y vocación entregan parte de su vida a formar con tesón a aquel contingente de ciudadanos del futuro que la sociedad peruana necesita `para continuar su incesante devenir. Sí. Es su majestad el Maestro. Un ser que imbuido de amor comparte solidariamente con sus segundos hijos su refulgente tesoro: La sabiduría de su conocimiento y amor.

Es el Maestro, el trabajador de la Educación. Aquel personaje que como Cristo es valorado y menospreciado a la vez. Es el Maestro, que como Jesús deja la comodidad y los privilegios de la ciudad para adentrarse en las entrañas del Perú Profundo para rescatar de la ignorancia a los desposeídos de la Patria entregándoles la luz de los valores humanos.

Es el Maestro, que pintando cada día va su blanca y tersa cabellera llevando de la mano a sus discípulos por los senderos del bien va sorteando con coraje los mil obstáculos que le coloca el destino. Es el Maestro, que tras las heladas cumbres de los Andes, la enmarañada Selva y los atosigantes arenales de la Costa va sembrando la semilla de la ilusión y la esperanza en el fértil corazón y mente de sus discípulos como hace dos mil años lo hiciera Jesús de Nazareth.

Arribamos al 6 de julio y nuestra memoria se refresca con los pasajes de la historia recordando que fue el Presidente Manuel Apolinario Odría quien instituyera un 6 de julio de 1953 el día del maestro en recuerdo de la creación por el General don José de San Martín, de la Primera Escuela Normal realizada un 6 de julio de 1822 .Arribamos al 6 de julio y nuestro corazón palpita de gratitud por la huella que dejaron probos maestros como José Faustino Sánchez Carrión, José Carlos Mariátegui, José María Arguedas, Julio Chiriboga Vera, José Antonio Encinas, Horacio Cevallos Gámez, Ricardo Dolorier Urbano, Emilio Barrantes, Augusto Salazar Bondy, entre muchos más.

Este día que sea de reflexión para nuestros colegas los maestros del Perú, de renovación de nuestro compromiso para seguir en la brega con ahínco y responsabilidad prodigando sabiduría y buen ejemplo, y , para nuestras autoridades nacionales, regionales y locales la oportunidad para brindar a nuestros maestros los medios necesarios para que el esfuerzo desplegado por ellos sea exitoso. ¿De qué vale bonitos locales, un magnífico mobiliario, excelente material didáctico y equipamiento si al maestro no se le capacita adecuadamente y se le remunera de manera justa. ¿De qué vale todo esto si el maestro fortalece su vocación magisterial nutriéndose mística y capacidad día tras día?

El día de hoy 6 de julio del 2024 renovamos nuestro fraternal saludo a todos los maestros del Perú y el ande liberteño haciendo votos porque algún día la educación se convierta en la herramienta milagrosa que nos permita lograr la real transformación de la Patria sobre la base de la dignidad, la libertad y la justicia social.