Por: Dionicio Mantilla León
Coherente con su
ideología neoliberal de favorecer la producción extranjera en desmedro de lo
nacional el economista Luis Carranza, (ex Ministro de Alan García y hoy con
Fuerza Popular) criticó, en el debate de equipos técnicos del último domingo,
la propuesta económica del partido Perú Libre respecto a las importaciones
afirmando que la prohibición de las mismas constituiría un
serio atentado contra la economía del país y que conduciría al alza del precio
de los alimentos. Quien les habla no milita
en ningún partido político, es demócrata, y se inclina por el cambio del actual
estado de cosas, por ello creo necesario, en honor a la verdad, poner al
descubierto dicha temeraria afirmación con las siguientes precisiones:
En el Plan del Bicentenario libre de
corrupción de Pedro Castillo, en el capítulo económico leemos lo siguiente: “SE
FRENARÁ LA COMPETENCIA DESLEAL DE IMPORTACIONES QUE AFECTEN A LA INDUSTRIA
NACIONAL Y AL CAMPESINADO, EN ESPECIAL A CONFECCIONISTAS, INDUSTRIA DE CALZADO y
GANADEROS LECHEROS. No se refiere para nada a “prohibir” a raja tabla, sino “frenar la competencia
desleal” de las importaciones porque desfavorecen la producción nacional.
Un ejemplo claro de afectación es lo
que viene ocurriendo con la industria del calzado en los distritos de El
Porvenir y Florencia de Mora, en Trujillo y a las confeccionistas de Gamarra en
el distrito de la victoria, en Lima. Afectación que nuestros pequeños
industriales del calzado tratan de evitar con las llamadas “salvaguardias”
respecto a la importación de calzado chino que ingresa al país a precios
bajísimos y con calidad inferior haciendo así una competencia desleal a
nuestros pequeños industriales y porqué ocurre esto porque el TLC suscrito en
este rubro con el gobierno chino, el gobierno peruano, sencillamente, les ha
liberado del pago de impuestos o aranceles y, más aún, dichos productos vienen
subsidiados o liberados del pago del IGV por su gobierno. ¿Ocurre acaso eso en
el Perú? ¡No!
De otro lado, nadie ha dicho jamás el
absurdo de que se va a prohibir la importación de trigo ni del maíz amarillo
duro, productos que no producimos en cantidad apropiada y que son necesarios
para la industria del pan y la industria avícola, tal como así lo afirman
falsamente los continuistas seguidores de Keiko Fujimori.
Nadie está en contra de los TLC (Sería
una insensatez en una economía global) siempre y cuando no dañen nuestros
intereses nacionales para ello es necesario analizar sus pro y contra en un
marco de equidad libre de los lobys de los neoliberales sin perder de vista la
urgencia de fomentar nuestra producción agrícola y pecuaria, así como nuestra
industria nacional en muchos rubros fundamentalmente en los que hoy nos hacen
falta o tenemos muy escasa producción, pero siempre buscando la calidad a fin
de competir lealmente con la producción extranjera. Por eso la necesidad de la
creación de un Ministerio de Ciencia, Tecnología e Investigación como lo
propone Pedro Castillo ( No el ideario de Cerrón) es muy importante.
Por su parte el Ing. Alejandro,
Fuentes Presidente de la Asociación de Productores Agropecuarios del Perú opinó
(En Línea Directa de Sol TV el día jueves 27/05/21) que hasta en EE. UU. y
Europa protegen su producción nacional y
allí “nadie se rasga las vestiduras” como acá si lo hacen los seguidores de
Keiko Fujimori afirmando que “nos vamos a ir a la bancarrota y los precios de
los alimentos van a subir” como si los zapatos se fueran a comer. Tampoco nadie
se escandaliza por que el Presidente de EE.UU. Joe Biden va a aumentar de 20 %
a 39% el impuesto a las sobre ganancias que ya vienen pagando los millonarios de su país, pero acá, al oír la
propuesta de crear un impuesto a las sobre ganancias a las grandes empresas y
a los millonarios, los continuistas se
“jalan de los cabellos” y se espantan exclamando “¡Comunistas!¡Terroristas!” y
hasta desean la muerte sembrando el “cuco” del comunismo por esta
propuesta como si los peruanos fuéramos
ignorantes y no supiéramos leer e informarnos de lo que ocurre en el mundo.
Algo más, la creación de un impuesto
a las sobre ganancias de las grandes empresas y a los millonarios es
recomendado por el mismo Fondo Monetario Internacional (FMI) de influencia
capitalista recomendando “considerar una contribución temporal de recuperación de la Covid 19 que grave los
ingresos más altos y la riqueza” Si
crear en nuestro país un impuesto a la riqueza de los millonarios es malo
entonces el Presidente de EE.UU. Joe Biden y el FMI también serían comunistas y
terroristas.
¿Defender la producción nacional es
malo? ¡No! Los malos son los que desean que estas cosas continúen igual de
injustos, que no haya cambio, que los confeccionistas de calzado de Trujillo y
los confeccionistas de ropa de Gamarra, en Lima sigan sufriendo; que no aumente
nuestra producción y no se promueva la industrialización para continuar
dependiendo de otros países. Los TLC y
las importaciones deben seguir, pero no
a ojos cerrados y siempre y cuando se ejecuten con reglas claras y equitativas,
sin abusos y pensando en el interés nacional y no en los intereses de los que
se lucran suscribiendo TLC amañados. ¡Cambio o continuismo, esa es la cuestión!
¡Hacemos votos por una Patria sin pobres, democrática, desarrollada y libre de corrupción!