Por: Dionicio Mantilla León
Hoy se cumplen 72 días de las medidas restrictivas impuestas por el gobierno para contener a la mortal pandemia del COVID 19 que viene enlutando a nuestro país provocando dolor y muerte de miles de peruanos. Son más de dos meses que esta plaga ha detenido el normal devenir de nuestro pueblo y ha significado la escritura de un negro episodio de nuestra historia nacional. Episodio que ha desnudado nuestras flaquezas y carencias en el rubro de la salud que, junto a la educación, han sido ostensiblemente descuidadas por todos los gobiernos de turno desde inicio de la era republicana pese a conocerse que son los pilares estructurales de nuestra sociedad. Una responsabilidad que también recae al del Ing. Martín Vizcarra en el corto tiempo que tiene de mandato.
Sin embargo, por encima de esta omisión, justo es reconocer al presente régimen gubernativo su oportuna reacción y la aplicación de una estrategia adecuada orientada a detener el avance de esta peste, estrategia que de no haberse aplicado con responsabilidad, capacidad y dedicación los efectos vendrían siendo más devastadores siendo la medida más trascendente dedicar para la contención de la pandemia una partida económica especial el 12% del PBI y la venta de bonos de tres mil millones de dólares los que vienen invirtiéndose en la compra de medicamentos, pruebas serológicas y moleculares, equipos médicos, mejoramiento de la infraestructura hospitalaria, entre otros; sin embargo, al parecer, esto resulta insuficiente conociéndose de que algunos nosocomios ya vienen colapsando.
Demostrando sagacidad, coraje y dotes de liderazgo, virtudes ausentes en los últimos mandatarios que hemos tenido, el Ing. Martín Vizcarra viene timoneando este barco que se llama Perú en medio de esta negra tormenta implementando no sólo acciones de contención a la plaga sino medidas financieras, económicas, sociales y laborales y, para lograr su optimización y hacer menos aflictiva nuestra situación, no ha dudado en efectuar los cambios ministeriales necesarios los mismos que, ha mejorado el accionar de los sectores de Salud y del Interior.
Sin lugar a dudas que la aparición de la pandemia en nuestro país ha ocasionado serios daños en nuestra economía y los diversos sectores de la vida nacional a nivel de catástrofe nos ha afectado muy seriamente anímicamente provocando situaciones de zozobra y agudo estrés, sobre todo, en nuestra niñez y personas de la tercera edad y agudizando los niveles de pobreza y los que eran ya pobres hoy son extremadamente pobres.
Si bien es cierto el logro del objetivo de la contención de la pandemia es lento debemos tener en cuenta que nos enfrentamos a un problema muy difícil con la atingencia de que el sistema de Salud de nuestro país tiene siglos de abandono, por esta razón considero que el esfuerzo desplegado hasta hoy por el Gobierno Central para contener la pandemia debe ser valorada en su verdadera dimensión ahora que la curva de la tasa de su avance se resiste a aplanar, un esfuerzo que debe ser imitado por las gobernantes de los demás niveles y por la misma ciudadanía peruana en su conjunto. Lamentablemente esto no es así, pues el Gobierno Regional de La Libertad y la mayoría de gobiernos locales no vienen cumpliendo con la misión que les compete.
Una prueba de ello es la negligencia del Gobierno Regional de La Libertad en invertir el presupuesto de S/.1`310, 882 asignado para el combate al COVID 19, gastando sólo S/.378, 359 (28%) mientras faltan en los hospitales faltan ambientes, medicamentos, equipos médicos, respiradores mecánicos. Y, nuestra provincia no se salva pues del presupuesto asignado de S/. 1`802, 457 sólo se ha gastado S/. 271, 360. Falta sólo una semana para levantarse la cuarentena y nuestras inefables autoridades regionales y locales mezquinan el gasto, para ellos no cuenta que nuestra región ya cuenta con 1,997 infectados y 116 fallecidos.
¿Al Gobernador Regional, Manuel Llempén, y al Gerente Regional de Salud, Constantino Vila, no les da vergüenza que el Ministerio de Salud les dé un plazo de 10 para que elaboren un plan de acción (recién) que corrija este acto de negligencia? ¿Por qué el Gobernador no atendió el reclamo oportuno de la Federación Medica de cambiar al Gerente Regional de Salud? Nuestra región hubiese tenido menos contagios y letalidad si hubiese existido liderazgo, responsabilidad y dedicación de nuestras autoridades regionales. Y si bien nuestra provincia tiene un solo caso positivo es por el interés puesto por nuestras rondas campesinas en el cuidado de las fronteras provinciales; empero, tengamos en cuenta que en Otusco y Julcán no existe ninguno.
Desconocemos la decisión que adoptará el Gobierno Nacional respecto al levantamiento de la cuarentena lo que si sabemos es que al pueblo nos asiste el compromiso de acatar las medidas restrictivas y cumplir responsablemente todas las recomendaciones sanitarias dadas por el Ministerio de Salud para así, juntos, vencer al enemigo común de los peruanos: el COVID 19.