LA CONTAMINACIÓN AMBIENTAL PROVOCADO POR LA ACTIVIDAD MINERA EN EL CERRO DE EL TORO ES UNA PESADILLA QUE NO TIENE CUANDO ACABAR SIN QUE NINGUNA AUTORIDAD SE PREOCUPE EN SOLUCIONAR CONVIRTIENDO LAS COMUNIDADES ALEDAÑAS EN PUEBLOS FANTASMAS.
Por: Dionicio Mantilla León
“No podemos respirar! ¡Nuestra casa está
llena de polvo! ¡Mis animalitos se mueren! Ya no podemos sembrar!. Huele feo!.
¡El agua esta contaminada! Las explosiones nos ensordecen y las paredes de
nuestras casas se agrietan! ¡Señores autoridades, por favor ayúdennos!” Son los
desesperados gritos de cientos de personas cuyo medio ambiente se encuentra
contaminado y reclaman ayuda a las autoridades. ¿Son acaso pobladores de la
Ciudad de Cerro de Pasco o de la Oroya lugares en donde las mineras
irresponsables vienen destruyendo poco a poco la vida de los lugareños?
¡No! ¡No son de esos lejanos lugares!
Son los moradores de las comunidades campesinas de los alrededores de la ciudad
de Huamachuco. Son los gritos de hombres y mujeres, de niños y jóvenes,
lanzados el último sábado en Radio Los Andes de Huamachuco, que por desgracia
tienen sus casitas, animales y sembríos cerca al cerro El Toro. Son los
caseríos de El Toro, Shiranmaca, Coigobamba, Paranshique y Cumumbamba Cientos
de moradores que viven de los que producen sus chacritas y que hoy tienen que
sufrir la pesadilla de vivir muy cerca de lo que años atrás fuera el histórico
caserío de El Toro lugar que sirviera de centro de herrería donde se fabricaron las armas que utilizara nuestro
ejército contra los invasores chilenos en las llanuras de Purrumpampa o La
Cuchilla.
Un caserío El Toro cuyo suelo años atrás existiera
un cerro que era un monumento a la vida
por el multicolor de sus chacras y bosques, pero que, hoy, luce convertido en
un cementerio, en un monumento a la muerte con decenas de cruces aún no
levantadas como fatídicas señales de que allí murieron decenas de hermanos
mineros victimas de la ambición de riqueza de un grupo de personas inescrupulosas
que menosprecian la vida ajena. Mineros irresponsables que, como las huestes de
Atila, vienen sembrando la muerte en una zona anteriormente hermosa, pero que al
surgir la fiebre del oro contrataron a campesinos como obreros sin brindarles
ninguna medida de seguridad provocando su muerte.
Siempre se ha dicho que la minería
informal es la que origina la contaminación, pero ahora, según afirman los
moradores, son también las empresas formales las que al parecer no respetan las
normas legales de explotación minera.
Nadie está en contra de la minería por
cuanto somos conscientes de que es una importante fuente de divisas (dólares) Y
eso está muy bien por ello las autoridades deben brindarle las facilidades del
caso, pero siempre y cuando se desarrolle de manera correcta sin atentar contra
el medio ambiente ni contra la vida y respetando la llamada responsabilidad y
rentabilidad social. De allí que resulta muy necesaria la intervención
supervisora de las autoridades de Energía Minas en esta zona, así como
importante resulta que el gobierno lleve a la práctica la zonificación
económica territorial del país vale decir un trabajo de ubicación de los
lugares apropiados para la explotación de nuestros recursos naturales que
concluya en un mapa en donde estén determinados los lugares para el desarrollo de
actividades agrícolas, cual para la minería, ganadería e industria.
Pero el problema no es de estos tiempos,
viene de años atrás provocando la rotura del equilibrio ecológico y destruyendo
la hermosura del paisaje anterior y cuando las autoridades han querido
intervenir para investigar las causales de las muertes de algunos obreros
sencillamente no se les ha dejado ingresar. Es más, en estos últimos tiempos el
Consejero Regional Dr. Greco Quiroz se encuentra empeñado en lograr la supervisión departe de las autoridades
regionales y nacionales de esta zona minera la misma que se desconoce el avance
de sus gestiones.
NUESTRA INVOCACIÓN
A través de este medio llamamos a los
campesinos afectados para que se organicen en Comités de Defensa y defiendan su
derecho a la tranquilidad y la intangibilidad de sus propiedades e inviten a
los nuevos congresistas para que sean sus intercesores ante el ante las
autoridades de Energía y Minas; asimismo, nuestro llamado a las autoridades
provinciales, regionales y nacionales para que asuman el rol que por Ley les
corresponde cual es el de ser defensores de los intereses de la comunidad y se
fajen por ella, pues su cargo no es sólo para figuretear y asistir a ceremonias
cívicas.
De otro lado, pedimos también
a los que se dedican a la actividad minera para que sean conscientes y
consideren que los moradores afectados por la contaminación podrían ser sus
familiares. Señores trabajen en eso pero, pero respetando las normas legales. La
labor de la minería irresponsable y contaminadora del medio ambiente constituye
una acción condenable, criminal y debe ser detenida y sancionada severamente.
Ella constituye la otra cara de este importante sector económico de nuestro
país. De otro lado la minería responsable y respetuosa de la Ley merece nuestro
respeto. Como sabemos esta actividad motiva nuestra satisfacción y orgullo pues
su producción ocupa los primeros lugares
a nivel latino americano y mundial.
¿QUIÉN DETIENE ESTE INFIERNO?
Según el Gerente Regional de Energía, Minas e Hidrocarburos
de la Libertad, Raúl Araya el Cerro El toro es el principal foco de
contaminación a nivel nacional y el único donde se trabaja con cianuro a tajo
abierto. ¿Qué dice la Gerencia Regional del Medio Ambiente y la Fiscalía? Hasta hora se sabe que han muerto 78 obreros
y trabajan niños y niñas en condiciones infrahumanas. ¿QUIÉN DETIENE ESTE INFIERNO?