Brote vírico ya cobra al menos 213 vidas
La rápida expansión del nuevo brote de coronavirus, surgido en la ciudad china de Wuhan, obligó ayer a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a declarar la emergencia internacional, la sexta en su historia.
Si bien el comité de expertos de la OMS había optado la semana pasada por no emitir la alerta global, en esta ocasión, se adoptó casi por unanimidad.
“Declaramos esta alerta no por lo que está ocurriendo dentro de China, sino por la situación en otros países, y por el temor a que el virus pueda extenderse a lugares con sistemas sanitarios más débiles”, anunció el director general de la entidad sanitaria mundial, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en rueda de prensa.
Con esta declaratoria, se espera facilitar la coordinación de una “acción global” para combatir el nuevo coronavirus, nombrado provisionalmente 2019-nCoV.
“La única forma de que derrotemos a este brote es que todos los países trabajemos juntos en un espíritu de solidaridad y cooperación. Estamos juntos en esto, y solo podemos detenerlo juntos”, agregó el titular de la OMS.
Propagación
Lo que asusta a Gobiernos y a especialistas es la velocidad con que se esparce la epidemia. En el lapso de un mes, según agencias de noticias internacionales, ya hay alrededor de 9692 casos confirmados de contagios (el brote se reportó a la OMS el 31 de diciembre). Este ritmo de infección es bastante superior al del mortal SRAS (Síndrome Respiratorio Agudo Severo), que entre fines de 2002 y mediados de 2003 -un lapso de aproximadamente siete meses- contagió a 8096 personas a nivel mundial.
En cuanto a los decesos, China informó ayer del peor balance de muertos por el nuevo coronavirus en un día: 42 fallecidos, llevando el total a por lo menos 213.
Ante esta situación, el Estado incrementa las medidas de protección y prevención.
Alrededor de 56 millones de personas han sido aisladas, sin poder salir de sus ciudades, y Wuhan, el corazón de la epidemia, lleva días pareciendo una urbe fantasma. Allí, además, el Gobierno lucha contra el reloj para construir en tiempo récord de 10 días un hospital para albergar los casos más graves. El nosocomio debería estar listo el 3 de febrero.
Estas acciones han sido celebradas por la OMS, que aclaró que “de ninguna manera debe entenderse la declaración de emergencia como un voto de desconfianza hacia China”.
Asimismo, Tedros Adhanom Ghebreyesus consideró que, por ahora, “no es necesario imponer nuevas restricciones en viajes o comercio”. Sin embargo, varias compañías aéreas, como British Airways, Lufthansa, Iberia, Air France o la indonesia Lion Air, anunciaron la suspensión de sus vuelos hacia China continental.
Además, grandes empresas como Toyota, IKEA, Starbucks, Tesla, McDonald’s y el gigante tecnológico Foxconn decidieron suspender de forma temporal su producción o cerrar sus tiendas en China.
Se teme que, tras el brote vírico, el crecimiento del PBI chino en el primer trimestre del 2020 caiga un punto porcentual hasta 5% o incluso menos.
Temor global
Mientras Beijing lucha contra la epidemia, otros países también se preparan para controlar el mal, que ya está presente en una veintena de naciones (ver infografía).
Ayer, India y Filipinas reportaron sus primeros casos. También lo hizo Italia. El primer ministro, Giuseppe Conte, confirmó que dos turistas chinas presentaban la enfermedad y anunció que cerrará el tráfico aéreo con el país asiático. Además, en un día tenso, unas 7000 personas de un crucero fueron impedidas de desembarcar en el puerto de Civitavecchia, cerca de Roma, por casos sospechosos de coronavirus a bordo. Finalmente, las pruebas preliminares a una pasajera china descartaron la presencia de la infección.
Cabe añadir que casi todos los afectados por coronavirus se han infectado en China, pero algunos países ya empiezan a informar de contagios locales. Hay al menos ocho casos de este tipo en Alemania, Japón, Vietnam y EE.UU. En este último país, se registró este jueves el primer caso de alguien con el mal que no se infectó en China. Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) indicaron que se trata de una persona que vivía con una mujer de Chicago que había viajado a Wuhan.
Para evitar que el virus se siga propagando, Washington desaconsejó a sus ciudadanos viajar a China. Medidas similares han sido tomadas por otros Gobiernos, como el británico y el alemán. Rusia, por su parte, anunció que iba a cerrar su frontera con el gigante asiático.
Entre tanto, varias naciones han comenzado a sacar a sus connacionales de suelo chino. Un avión enviado especialmente para evacuar unos 200 ciudadanos franceses despegó de Wuhan. Ellos permanecerán en cuarentena por dos semanas. Roma también anunció el envío de una aeronave a Wuhan, Alemania tiene planeada la evacuación de unos 90 conciudadanos “en los próximas días”, y el Reino Unido debe retirar hoy unas 200 personas. (DIARIO CORREO)