lunes, 26 de abril de 2021

Encuesta IEP: búsqueda de un cambio, miedos y rechazos en la segunda vuelta

El respaldo a Castillo aparece asociado a la identificación del candidato con algo distinto a lo conocido, una salida de la población a la política que no quiere. Al contrario, el apoyo a Keiko se da principalmente por rechazo a la izquierda y un conformismo por considerarla el mal menor.

En la elección por Castillo destacan aspectos asociados a la búsqueda de algo distinto, mientras que con Fujimori predomina cierto conformismo. Foto: composición LR

La búsqueda de un cambio, los miedos y los rechazos marcan este momento de la competencia electoral de segunda vuelta para la presidencia del país, según coinciden especialistas al analizar la última encuesta telefónica de representación nacional del Instituto de Estudios Peruanos (IEP), investigación realizada para La República.

El estudio, en el que Castillo tiene un 41,5% de intención de voto y Keiko un 21,5%, muestra la ventaja del candidato de Perú Libre en casi todas las zonas del país y grupos sociales. La lideresa fujimorista tiene preeminencia clara solo entre los más acomodados (niveles socioeconómicos A y B) y entre quienes se identifican como de derecha.

Las razones más recurrentes de quienes votarían por Castillo se refieren a una diferenciación de esta opción respecto a lo conocido, además de un rechazo a la otra alternativa. Un 18% de este grupo lo respaldaría por sus propuestas, un 11% por el antifujimorismo, un 10% porque representa para ellos un cambio y un 10% porque es nuevo en política. Es decir, un 20%, una quinta parte de quienes lo respaldan, votaría por él por identificarlo como un candidato distinto a lo que hemos tenido.

En cambio, los motivos principales de quienes respaldan a Fujimori se refieren al rechazo hacia el contendor y cierto conformismo. Un 18% de este grupo le daría su voto por el antiizquierdismo, un 12% lo haría porque la consideran el mal menor y un 11% porque es mujer.

De este modo, en la elección por Castillo destacan aspectos positivos asociados a la búsqueda de algo distinto, mientras que en el apoyo a Fujimori predomina cierto conformismo.

Pedro Castillo obtuvo el mayor porcentaje en la primera vuelta y Keiko Fujimori se mantuvo e segundo lugar. Foto: composición/La República

Explicaciones

El sociólogo David Sulmont, profesor de la Universidad Católica del Perú (PUCP), advierte las dificultades de Fujimori para superar el rechazo hacia ella.

“Llama la atención el rechazo fuerte que tiene Keiko, su dificultad para convencer a sectores del electorado que no han votado por ella. Le cuesta más vencer las resistencias. Eso porque se le asocia con su pasado político y la clase política que está defendiendo el statu. En cambio, Castillo representa el cambio, algo diferente en un contexto de serias deficiencias que tienen para funcionar el Estado y el mercado”, sostiene.

“Keiko concentra el voto en sectores más acomodados, que serían los más beneficiados por un sistema económico y político del cual ella se muestra como la abanderada”, añade Sulmont.

El sociólogo identifica tres problemas claves en Fujimori: que no es una figura nueva, que se opone al cambio y que despliega una campaña de miedo.

“No es una política nueva, tiene una historia pesada, ya perdió dos elecciones y está asociada con la inestabilidad política del último quinquenio”, dice.

Uno de los problemas de Fujimori es que está asociada con la inestabilidad del último quinquenio, dijo experto. Foto: difusión

“Se ubica como abanderada del statu quo cuando el Estado neoliberal que inició con el gobierno de su padre y la economía neoliberal de mercado que defiende muestran serios problemas para enfrentar la pandemia. Se pone como defensora de algo que no funciona. La gente busca un cambio de eso”, anota.

Otro problema es su campaña de miedo de chavismo y terruqueo. Se ha usado tantas veces que pierde credibilidad. Eso puede convencer a los que ya están convencidos”, explica.

“Se tiene que convencer a un electorado que busca un cambio. Este se logra identificar con Castillo. Él aparece como un candidato más cercano a la gente, pero también es un candidato por descubrir”, advierte.

“Castillo trata de ser más apaciguador y se ha mostrado más moderado que el fujimorismo, que levanta que se viene el caos. Keiko no ofrece esperanza, sino defender un sistema que a pocos beneficia. Castillo representa novedad, cambio y Keiko el mal menor, voto más de miedo que propuesta”, dice.

La politóloga Paula Muñoz, docente de la Universidad del Pacífico, destaca el efecto político de la pandemia y la crisis.

La crisis exacerbada por la pandemia ha hecho que la gente busque a alguien nuevo, de fuera del sistema responsable de la crisis y que prometa cambios. En un momento se vio a Lescano, pero no convenció y era del sistema. Al final de la campaña vieron a Castillo. En ese sentido, esto se parece mucho a la elección de 1990”, dice.

“La elección se divide. La opción por Keiko está muy encerrada en Lima, sin capacidad de salir. Su campaña no convence a quienes debería convencer, porque propone defender lo que ya existe y no hacer cambios, como sí ofreció García el 2006 y la campaña moderada de Humala el 2011. La otra razón es el antifujimorismo”, explica.

Politóloga explica que la elección está dividida y que la mayor cantidad de votantes por Fujimori está en Lima . Foto: John Reyes/ La República
El reconocimiento de la necesidad de un cambio impactaría también en las preferencias por Castillo en sectores como la clase media o zonas norteñas.

“También es fuerte cómo Keiko no retiene bastiones en el norte y cómo Castillo le saca ventaja grande allí y es alta incluso en el sector C. Es sintomático de cómo la crisis ha expuesto limitaciones de los avances que tuvimos”, añade Muñoz.

Sin embargo, también destaca que es grande el grupo de peruanos que no llega a ser convencido por ninguna de las opciones. Alrededor de un tercio del país todavía no decide.

Reacciones

David Sulmont, sociólogo PUCP

“Keiko defiende el statu quo cuando Estado y economía muestran serios problemas para enfrentar la pandemia. La gente busca cambio y se identifica con Castillo, que es un candidato por descubrir”.

Paula Muñoz, politóloga (UP)

“Es fuerte cómo Keiko ni retiene bastiones en el norte y cómo Castillo le saca ventaja grande allí y es alto incluso en el sector C. Es sintomático de cómo la crisis expuso limitaciones de nuestros avances”.(LA REPÚBLICA)