domingo, 29 de enero de 2012

COLEGIAL DE 12 AÑOS SE AHORCÓ EN SU CUARTO


LA LIBERTAD - Demasiado joven para morir. Un humilde niño al parecer no pudo lidiar con la reprimenda que le dio su madre por no juntar agua, y decidió quitarse la vida ayer en el centro poblado menor Alto Trujillo.

F. G. A. E. (12) supuestamente no tenía ningún problema psicológico, de salud, o de otra índole, a decir de vecinos y familiares. Sin embargo, decidió suicidarse en el cuarto de su vivienda, ubicada en el barrio 2A, manzana S, lote 13, del referido centro poblado.

El joven, quien apenas había terminado el sexto grado de primaria en el colegio Jorge Basadre, estuvo jugando a las cartas con unos amigos, desde las diez de la mañana hasta las dos de la tarde. Luego, él fue a almorzar a su casa.

Ya en su hogar, su madre, Margarita Soledad Espinola Pinedo (40) le reclamó la falta de agua para beber (él no la había juntado). Margarita le habría dado una cachetada.

En respuesta, el niño le refirió molesto que no le compró el desodorante que le pidió, pero ella le dijo que al día siguiente adquiriría aquel producto de limpieza personal.

COLGADO.

Luego de ello, la madre fue a tomar una siesta en su cuarto. Al despertar, aproximadamente a las tres de la tarde, fue al cuarto de su hijo ubicado en el corral, y lo encontró colgado de su correa y ésta, sujeta a una viga. Esto según refirió el tío del occiso, Job Espinola Pinedo.

Inmediatamente, el niño fue trasladado a la Posta de Salud de Alto Trujillo, ubicada en el Barrio Tres, donde sólo se limitaron a certificar su deceso.

El hecho tomó por sorpresa a los amigos del menor, puesto que en ningún momento lo vieron triste o pensativo cuando estaban jugando a las cartas.

Por el contrario, indicaron que se encontraba de muy buen ánimo, porque iba a participar de un campeonato de fulbito sub 15.

“Estaba de lo más alegre. Estuvimos varias horas jugando ‘casino’ y se reía, hacía bromas. No lo vimos triste en ningún momento”, refirieron.

Ayer, alrededor del mediodía, llegaron los restos del niño suicida a su vivienda, donde es velado por sus familiares y vecinos.

Su madre, quien se dedica a la venta de verduras en el mercado La Hermelinda, constantemente protagonizaba desgarradoras escenas de dolor.(correo)