El mensaje político del Gobierno de Dina Boluarte y el Congreso de tener elecciones generales recién en abril del 2024 ha generado rechazo de organizaciones sociales. Son al menos diez las regiones del país donde se reanudarán las movilizaciones y paros desde este miércoles 4 de enero. A la demanda sobre el adelanto de elecciones ahora se suma también la condena a las muertes generadas por la represión policial y militar por el estado de emergencia.
Por: Wilber Huacasi
En un intento por atenuar la situación de conflictividad social, el ministro del Interior, Víctor Rojas Herrera, visitó ayer la región Puno. Intentó sostener una reunión con el nuevo gobernador Richard Hancco, pero el encuentro no se concretó. La autoridad regional ha exigido públicamente la renuncia de la presidenta Dina Boluarte.
El ministro Víctor Rojas se limitó a confirmar que la Policía ya no participará en la llamada “marcha por la paz” y también consideró que el asesinato de personas en los paros “no debieron darse, (pero) las circunstancias se presentan así, lastimosamente”.
Protestas en el norte
En cuanto al norte del país, las convocatorias para movilizaciones o paros han surgido desde las rondas campesinas, en Cajamarca y la sierra de La Libertad.
En recientes declaraciones para La República, el presidente de la Federación Regional de Rondas Campesinas de Cajamarca, Aladino Fernández, informó que el paro será acatado desde el 5 enero, en las trece provincias.
En paralelo, las rondas campesinas acatarán una movilización programada para el 12 de enero, la cual ha sido denominada “la toma de Lima”. El dirigente de las rondas precisó que la principal demanda es el adelanto de elecciones generales para este año: 2023.
El centro y el sur
En Juliaca (Puno), el secretario de la Asociación de Presidentes de las Cuatro Zonas de Juliaca, Ántero Pimentel, ratificó que retomarán una huelga indefinida desde las cero horas del 4 de enero para exigir la renuncia de Dina Boluarte, el cierre del Congreso y el adelanto de elecciones para el 2023.
El dirigente cuestionó el anuncio del Ejecutivo de promover viajes de los ministros a las regiones para tender puentes de diálogo, al considerar que el Gobierno ya generó pérdida de vidas humanas.
En tanto, la Federación Departamental de Trabajadores de Arequipa (FDTA), que agrupa a cerca de 90 sindicatos, aseguró que la huelga que se inicia el 4 de enero a nivel de la macrorregión sur será pacífica.
Lugue Espinoza, dirigente del gremio, señaló que se concentrarán para movilizarse por las calles, pero descartó que vayan a promover bloqueos de las principales vías.
Por su parte, la plataforma comercial Andrés Avelino Cáceres de Arequipa informó que atenderán de forma restringida durante los días 4, 5 y 6 de enero, como apoyo al paro indefinido contra la presidenta Dina Boluarte y el Congreso.
La atención será solo de 3 a 8 a.m. y luego los cerca de 40 mercadillos cerrarán sus puertas para sumarse al paro.
El 4 de enero también habrá movilizaciones en Canchis y Canas (Cusco), además de Huancavelica. Al día siguiente habrá marchas en Abancay y Chincheros (Apurímac). Jornadas similares fueron anunciadas en Moquegua, Junín y Madre de Dios.
Ayer por la noche también se reunieron organizaciones sociales de Cusco y Ayacucho, solo para definir si realizan paralizaciones o solo marchas, pero desde ya anunciaron protestas contra Boluarte y el Congreso.
Congreso inicia sesiones sin agenda clara
La Comisión de Constitución del Congreso, que preside el fujimorista Hernando Guerra, sesionará hoy (9 a.m.) para escuchar a especialistas políticos y del derecho.
La agenda contempla exposiciones del politólogo Martín Tanaka, el sociólogo Fernando Tuesta, además de los abogados Víctor García Toma, Virgilio Hurtado y Ernesto Álvarez.
El grupo presidido por Guerra aún no da señales sobre las reformas constitucionales que priorizarán en enero, aunque el fujimorismo y las bancadas afines han deslizado que irán por la bicameralidad y la reelección. (LA REPÚBLICA)