Daniela Fernández Paredes apareció muerta en departamento que compartía con suboficial PNP, Richard Vásquez Guillén, en Lima.
SOSPECHOSO. Padre de joven trujillana persisten en la culpabilidad de policía.
Gladis Paredes Bello y Luis Fernández Verástegui son los padres de la trujillana, Daniela Fernández Paredes, quien el último domingo por la noche apareció muerta, de un balazo en la cabeza, en un departamento, ubicado en San Martín de Porres(Lima), que compartía con su pareja, el suboficial de la Policía, Richard Vásquez Guillén, y su menor hija.
Ellos están convencidos que el agente del orden asesinó a Daniela Fernández, y por ello han mostrado su indignación por la rápida liberación de éste. “Todo apunta a que fue él quien le disparó a mi hija. Por eso pido que lo recapturen. Como pueden haberlo liberado si es sospechoso de un asesinato”, expresó Gladis Paredes.
Como los resultados de la prueba de absorción atómica demora tres días y a una persona sospechosa solo se le puede retener 24 horas, Richard Vásquez fue liberado.
Los deudos de Daniela presumen que Richard Vásquez le habría quitado la vida en un arranque de cólera porque ella iba a finalizar la relación. “Hablé días antes con mi hija. Me pidió que viaje a verla porque quería terminar la relación con ese hombre, ya no podía seguir a su lado porque siempre discutían”, asegura Gladis Paredes y agrega que pretendía viajar a Lima, pero por falta de dinero realzaría el viaje el pasado lunes, sin imaginarse que el domingo por la noche le comunicarían que su hija estaba muerta, que se había suicidado, posibilidad que niega rotundamente.
Asevera además que aunque su nieta habría sido adiestrada para confirmar el testimonio de Richard Vásquez sobre el hecho, en algún momento mencionó: “Mi papá le ha hecho yaya a mi mami”.
El agente policial manifestó ante sus colegas que tras discutir con su pareja, tomó a su hija y se retiró del departamento, volvió a la media hora (11:00 de la noche) y la encontró muerta. “Se había disparado con mi pistola”, dijo.
Lo cierto es que Daniela decidió retomar la relación con el padre de su hija hace seis meses. Su cadáver fue traído el pasado martes a Trujillo, y es velado en casa de sus padres, en la urbanización Parque Industrial, distrito La Esperanza.(la industria)