Familiares de octogenario y dos mujeres fallecidas dijeron que nunca se les realizó un lavado gástrico, como es común en casos de intoxicación.
PESAR. Parientes de las víctimas necesitaron traer a los cuerpos hasta Trujillo para la necropsia.
Los familiares del octogenario y sus dos hijas que murieron envenenadas el último sábado, denunciaron que éstos no recibieron las atenciones médicas que posiblemente les hubiese salvado la vida.
Vale recordar que el trágico episodio ocurrió en el caserío Colpa Baja, ubicado a 20 kilómetros de Huamachuco. Toribio Ballena Murga (80 años) y su hija Juana Ballena Oliva (60 años), recibieron la visita de Luisa Ballena Oliva (46 años), quien era vigilante de de las Rondas Campesinas de Sánchez Carrión. Como cada fin de semana, las hermanas prepararon el almuerzo, y fueron a buscar a su padre, quien estaba sembrando en su chacra.
Primeros síntomas
Aproximadamente a las 2:00 de la tarde el anciano empezó a tener los primeros síntomas de dolor, por lo que Luisa Ballena llamó a su hija y le pidió que envíen una camioneta al caserío, para que fuera trasladado al hospital de Huamachuco. Posteriormente, Luisa y su hermana tuvieron los mismos síntomas, por lo que el vehículo volvió para trasladarlas al nosocomio.
Al respecto, Robert Ballena, hijo de la víctima más joven, denunció negligencia médica, debido a que no se hizo el lavado gástrico a los fallecidos, y el personal de la salud no les habría brindado la atención oportuna.
“A diferencia de mi tía y mi abuelo, mi mamá entró consciente a las 3:00 p.m. al Hospital Leoncio Prado, y murió aproximadamente a las 11:00 de la noche. Cuando preguntábamos cómo estaba, el personal médico nos decía que se encontraba bien, pero no nos dejaban verla. Ya en la noche, se puso mal y empezó a vomitar. Nos sorprende que no le hicieran ningún lavado gástrico”, lamentó.
Asimismo, indicó que realmente la familia no sabe qué es lo que pasó, por lo que solicitaron a las autoridades que investiguen el caso. Además, sostuvo que la familia no tenía problemas con sus vecinos.
Al respecto, el líder de las Rondas Campesinas de Sánchez Carrión, Martín Otiniano Otiniano, sostuvo que se encuentran a la espera de los resultados que arroje la Fiscalía y la Policía, pues una muestra del alimento ya está siendo analizada. Asimismo, exhortó a los funcionarios de la Gerencia Regional de Salud atender la falta de personal médico calificado en el Hospital Leoncio Prado.
“Lamentablemente, en la sierra los profesionales de la salud no le ponen atención debida a su trabajo. En este caso, los pacientes no han recibido los cuidados necesarios. Hacemos un llamado a la Gerencia Regional de Salud para que corrijan los problemas del Hospital Leoncio Prado. Los pacientes requieren un mejor cuidado”, refirió.
Dijo además que el personal médico deberá responder por qué el nosocomio cuenta con una gastroenteróloga y aún así no se realizó el lavado respectivo a los envenenados.
Finalmente, el dirigente expresó su molestia debido al ausentismo del médico legista en la provincia de la sierra liberteña, por lo que tuvieron que traer los cuerpos al mortuorio de Trujillo. “Si uno está de descanso, debería otro suplirlo (…)”, señaló.(la industria)