Una vez más, la irresponsabilidad al conducir provocó la muerte de una persona, pero en esta ocasión el culpable del hecho de sangre sería un agente policial que labora en la comisaría de Florencia de Mora.
EL CHOQUE. Ya eran las 3:30 de la madrugada de ayer cuando el auto de placa EO-2156 transitaba por la avenida Los Colibríes a toda velocidad.
De pronto, la unidad invadió la berma central de la vía, y chocó con un poste de luz eléctrica, a solo una cuadra de distancia de la avenida Juan Pablo II.
El impacto fue muy violento: la parte delantera de la unidad terminó destruida, lo que causó el deceso de Fany Armas Rodríguez (21), quien se hallaba en asiento de copiloto.
Momentos después, arribaron hasta el lugar del accidente agentes de la comisaría de El Alambre así como efectivos pertenecientes a la Compañía de Bomberos.
Cabe indicar que el conductor de la unidad, en vez de tratar de auxiliar a la fémina para salvarle la vida, optó por fugar.
A todo esto, es preciso indicar que dentro de la unidad se hallaron botellas de cerveza.
Tras una paciente labor, los bomberos lograron liberar el cuerpo inerte de la mujer de los fierros, que fue trasladado a la morgue del Hospital Regional para la necropsia de ley.
Posteriormente, la occisa fue llevada por sus parientes hasta su vivienda, situada en la avenida 8 de Setiembre en Florencia de Mora, donde la velan.
CULPAN A POLICÍA. Familiares de la occisa Fany Armas responsabilizaron a un suboficial de la muerte de la joven.
Dijeron que dicho policía, quien fue identificado como Marlon Siccha Chacón, labora en la comisaría de Florencia de Mora y de un tiempo a estar parte acosaba a la fallecida.
"Siempre la llamaba a su celular", expresó la hermana de la víctima, Luz Verónica Armas Rodríguez, quien agregó que un taxista amigo presenció el hecho y les aseveró que el presunto policía conducía a más de 120 kilómetros por hora. "Y cuando chocó salió del auto con el polo ensangrentado, se lo quitó y, en vez de ayudar a mi Fany, se fue corriendo", dijo entre evidentes muestras de dolor.
A todo esto es preciso indicar que Fany Armas trabajaba en un servicentro Petro Perú por la avenida Miraflores y estudiaba secretariado ejecutivo en un instituto particular.
DEJÓ UNA PRENDA. Como parte de las pruebas que aseverarían esta versión, Luz Verónica Armas y sus demás familiares mostraron una casaca manchada con sangre que supuestamente sería del agente policial Marlon Siccha, aún no habido.(correo)