Según Comisión de Fortalecimiento de la Función de Representación, 41,1% no sabe el nombre de un parlamentario de su región. Además, se considera al Congreso 86% corrupto.
Martín Hidalgo Bustamante
La mayoría de parlamentarios ha justificado el aumento de S/. 7 mil a S/. 15 mil para la Asignación de Función de Congresal, asegurando que este les permitirá mejorar su labor de representación que cumplen en sus respectivas regiones. Una reacción lógica tras enterarse, vía un estudio encargado por la propia Comisión de Fortalecimiento de la Función de Representación, de que 65,8% de la población no se siente representado por ningún legislador.
El tema se torna preocupante si se constata además que esa cifra negativa aumentó respecto al 2010, cuando la percepción alcanzó el 62,3%.
Los números de la comisión, extraídos de una encuesta de Imasen elaborada para el Congreso entre marzo y abril del 2012, también muestran que el 41,1% no sabe el nombre de al menos un congresista de su región. El 8,8% nombró a un legislador de otra región.
Esta cifra se ha incrementado considerablemente: en el 2010, 25,8% no sabía qué congresista residía en su circunscripción electoral.
El secretario ejecutivo de la Asociación Civil Transparencia, Gerardo Távara, halla en las cifras una grave demanda.
"La población tiene la sensación de que se mudan a Lima. Y los congresistas deben entender que la ciudadanía exige una nueva representación. No les basta con que los visiten una vez al mes. Les interesa saber si son capaces de ayudarlos a resolver problemas de la región", dice.
Távara enfatiza que las cifras negativas presentadas por la Comisión de Fortalecimiento de la Función de Representación aumentan en el desagregado por regiones. En La Libertad, por ejemplo, 95,3% no se siente representado por sus legisladores. Casos parecidos son los de Ayacucho (81,7%), Callao (78,1%), Áncash (70,3%) y Huánuco (75,6%).
Además, una encuesta nacional sobre corrupción, de Proética y elaborada por Transparencia, advierte que, del 0 al 100, se considera 86% corrupto al Congreso. Este informe forma parte del estudio legislativo citado al principio.
Aumento sin fin
Es en este marco que el aumento en el bono de representación no cuaja en la población. Carmen Omonte, titular de la Comisión de Fortalecimiento, asegura que no se cumplió el proceso de transparencia para sustentar dicho incremento.
En esa línea, Távara indica que no es posible brindar un fondo de libre disponibilidad a los congresistas sin antes haber presentado ante la población un sustento que lo justifique. "La población tiene que saber el uso específico de ese dinero. Lo mejor sería decir en qué se va a gastar el dinero", acota.
Cambios urgentes
Dentro de las propuestas del grupo de trabajo que revisa esta problemática está la creación de bancadas regionales.
"Los parlamentarios pueden tener puntos de vista distintos en temas nacionales, pero en los temas regionales una sola visión", afirma Távara.
Asimismo, propone que las comisiones deberían sesionar solo una vez al mes en la capital, para que los congresistas pasen más tiempo en sus regiones. El titular de Transparencia recuerda que esto es parte de una reforma electoral que viene siendo postergada.
(la república)