El coronel Harvey Colchado, en una reciente entrevista con Hildebrandt en sus 13, afirmó que Boluarte "terminará igual que Pedro Castillo, Alejandro Toledo y otros presidentes investigados y sentenciados". Según Colchado, su destitución no es un hecho aislado, sino parte de un plan estructurado liderado por Eduardo Arana, ministro de Justicia, con el respaldo del ministro del Interior, Juan José Santiváñez. Ambos habrían intentado frenar investigaciones sensibles, como el caso de Los Cuellos Blancos del Puerto. Colchado sostiene que estas acciones responden a intereses políticos, motivo por el cual ha apelado a instancias internacionales, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, aunque sin éxito. Su abogado calificó estas medidas como "arbitrarias y abusivas" y anunció que se emprenderán acciones legales para revertirlas.