23 de setiembre
El 23 de setiembre, Día de la primavera, simboliza la renovación de la naturaleza y la creatividad del espíritu humano. Curiosamente, la celebración del Día de la juventud coincide con la llegada de esta estación donde los rayos de sol empiezan a desplazar la bruma característica del invierno.
En el desarrollo del ser humano, la juventud es la edad que equivale a la primavera de la vida. Los jóvenes despiertan a la vida llenos de energía, de proyectos y optimismo. Por ello, ser joven implica ser una persona positiva y generosa, dispuesta a darse a sí misma por un ideal. Pero también significa no exigir tanto que lo comprendan, sino más bien comprender a los demás.
La juventud es una etapa de la vida humana que ha adquirido una especial importancia en los tiempos contemporáneos. La Organización de las Naciones Unidas la ha definido como la edad que va de los 15 a los 25 años. Sin embargo, la definición puramente cronológica se ha mostrado insuficiente. La juventud es un proceso relacionado con el período de educación en la vida de las personas y su ingreso al mundo del trabajo. Profundizando aún más la idea de juventud, se incide en los procesos de construcción de la identidad.
ESTACIÓN SONRIENTE
La primavera es una de las cuatro estaciones de las zonas templadas. Astronómicamente, comienza con el equinoccio de primavera (entre el 20 y el 21 de marzo en el hemisferio norte; entre el 22 y el 23 de setiembre en el hemisferio sur), y termina con el solsticio de verano (alrededor del 21 de junio en el hemisferio norte y el 21 de diciembre en el hemisferio sur). Sin embargo, se considera que la estación ocupa los meses enteros de marzo, abril y mayo en el hemisferio norte y de setiembre, octubre y noviembre en el hemisferio sur.
Durante la primavera los días se alargan, el sol sale un poquito antes y se pone otro poquito después. Por eso la noche se hace mas corta cada día.
La palabra primavera es sinónimo de vida, juventud, sol, aire y color. Asimismo, se identifica con el tiempo en que las cosas están en su mayor vigor, hermosura y frescura.
El inicio de la primavera es ideal para preparar la tierra y sembrar la mayoría de los cultivos básicos. Con ello se aprovecha la llegada próxima de las lluvias. Se plantan también una gran variedad de árboles frutales, hortalizas y legumbres. Como es la estación que sigue al invierno, representa un cambio de clima que se refleja en las plantas. Aparecen numerosas flores que visten alegres y llamativos colores, acompañadas de sugestivas fragancias.
Los animales también disfrutan del buen clima. Muchos de ellos se reproducen en esta época, las aves incuban sus huevos y hasta las abejas ponen los suyos. En las personas también se nota el reflejo de una estación colorida y alegre. La primavera es la estación más bonita del año y la más esperada por todos.