El centro médico donde atendieron a la víctima, de 19 años, fue intervenido por la Tercera Fiscalía de Prevención del Delito.
Las consecuencias de un aborto acabaron con la vida de una joven de 19 años, alumna de la Universidad Nacional de Trujillo.
El centro médico donde la estudiante se practicó el legrado, posterior al aborto incompleto, fue intervenido horas después por la Tercera Fiscalía de Prevención del Delito.
En dicho establecimiento, de nombre “Bonna Ventura” y situado en la cuadra seis de la avenida Salvador Lara de la urbanización Las Quintanas (Trujillo), la estudiante de iniciales K.U.CH. fue atendida por el residente ginecoobstetra Luis Antón Calderón, el pasado 12 de julio.
Dieciocho días después, la universitaria sufrió un desmayo en su centro de estudios, y a bordo de una ambulancia de los bomberos fue internada en el Hospital Belén.
En el nosocomio informaron que la joven ingresó en estado crítico y con un diagnóstico de abdomen agudo, perforación uterina y patología anexial.
Tras los exámenes correspondientes se descubrió que la víctima tuvo un embarazo ectópico roto, cuando el óvulo fertilizado se anida fuera de la cavidad uterina, y peritonitis bacteriana.
Finalmente, luego de sufrir múltiples paros cardiacos, la estudiante pereció en la Unidad de Cuidados Intensivos Maternos.(RPP)