Recrudece la violencia en nuestro
país, Ahora ya son 43 los muertos y decenas de heridos entre civiles y policías.
Las últimas víctimas, son de la localidad de Juliaca y Cusco. Esta vez se ha
descubierto que los manifestantes utilizaban armas de fuego hechizas. Ante este
cruento escenario el Perú entero clama
que se detenga la violencia. ¡Basta de matarnos y herirnos entre hermanos! ¡Todos
somos peruanos!
La población peruana debe entender que
la protesta es un derecho constitucional y tiene como propósito llamar la atención de
las autoridades indiferentes para que atiendan sus reclamos. Eso es lo normal y
justo. Destruir la propiedad pública y privada,
provocar el odio y la muerte no lo es. Destruir aeropuertos y bloquear, tampoco
es.
Los millones de peruanos lamentamos
profundamente la pérdida de las vidas de compatriotas de ambos bandos, entendiendo que esto provoca
aún más la ira. Los peruanos que no guardamos odio rechazamos el vandalismo,
pero también los excesos policiales, pero algo que llama poderosamente la
atención es: ¿Por qué los policías han venido usando armas de fuego existiendo
otros elementos de disuasión y contención? Esto debe ser materia de
investigación, por eso la Fiscal de la Nación, Patricia Benavides, ha dispuesto
abrir dos carpetas fiscales para investigar a la Presidenta de la República,
Dina Boluarte; el Premier, Alberto Otárola; el Ministro de Defensa, y el
Ministro del Interior quienes tienen responsabilidad política al margen de que
se le pueda hallar o no una autoría inmediata.
Y algo que también ha provocado rechazo
es la actitud del Premier, Alberto Otárola que el día martes durante su
exposición del Plan de Gobierno ante el Congreso, quien no hizo ninguna
autocrítica del accionar gubernamental frente al conflicto cuando somos
conscientes que ha habido excesos de la policía y anteriormente lo fue de parte
del Ejército. Esto no exime de culpa a la turba de vándalos que quemaron vivo a un policía integrante de la
brigada policial que intentaba evitar el incendio del aeropuerto de Juliaca,
tampoco a quienes han intentado ayer incendiar el aeropuerto del Cusco.
Detener la violencia en el país es un deber
prioritario del Gobierno y de los protagonistas del conflicto. Nuestra Patria
no se merece esto. Un clamor que debe ser escuchado, sobre todo, por los
azuzadores peruanos y extranjeros entre estos el boliviano Evo Morales.
¡Basta
de odio y violencia. Basta de regar nuestro suelo con la sangre de hermanos! Para
detener esta ola apocalíptica urge utilizar como estrategia el diálogo en el
cual si una de las partes tiene que ceder en algo racional y que no hiera los intereses
de la Patria, debe hacerlo. Todos los protagonistas del conflicto político deben
asumir sus responsabilidades y hacer una autocritica sincera e instaurar la
bandera de la vida, la paz y la unidad en el país.
Debemos ser conscientes que nuestros enemigos no están entre nosotros, están al frente y son: el atraso económico, la pobreza, la inseguridad, la corrupción y los intereses mezquinos de los azuzadores del odio y la violencia para luego cercenar o dividir nuestro territorio nacional. A los extranjeros que intervienen en asuntos internos de nuestro país, sean de cualquier ideología les exigimos abstenerse de hacerlo.
PRECISIONES
Todos tenemos derecho a expresar nuestra
opinión y nuestras propuestas. Esta es la mía, si alguien no está de acuerdo
debe sustentarlo con respeto sin insultos, ni calumnias. A aquellos que se
alimentan del vandalismo, el odio y la muerte no pidan que los demás peruanos compartamos
sus gustos macabros y de destrucción de la Patria. ¡No lo haré nunca!
Quien
escribe esta nota se ratifica en que no ha sido, no es, ni será militante de
algún partido político sea de derecha o de izquierda. No dependo de nadie. Me
siento orgulloso de haber sido un consecuente luchador social en favor de las causas
justas del digno pueblo Huamachuquino al
que quiero y en cuyo beneficio he concretado varias obras públicas, entre
ellas, la Posta Médica o Centro Médico de ESSALUD de Huamachuco y el Colegio
César Vallejo de esa ciudad. Fui dirigente sindical del SUTEP de Huamachuco,
sin vínculo con partido político alguno, liderando responsablemente al gremio sin
promover la violencia ni el vandalismo contando siempre con el apoyo de la comunidad
huamachuquina. Soy demócrata y de posición ideológica progresista. ¡ Nunca he
dejado de serlo!
Tuve el honor de ser Regidor de la Municipalidad Provincial de Huamachuco durante la gestión del Dr. Róger Gastañadui Risco, cargo por el cual no cobré ni un sol, pero fiscalice respetuosamente la gestión e hice obra comunal positiva. El año pasado dejé la tarea periodística durante varios meses por encontrarme gravemente enfermo. A quienes discrepan de esta línea de vida, les pregunto: ¿Qué han hecho o hacen de bueno por Huamachuco?
Hoy, he reanudado la tarea periodística en
otros medios de comunicación de Huamachuco y Trujillo en los cuales laboro
gratuitamente sin depender económicamente de nadie. Soy periodista autodidacta
y desarrollo mi labor desde hace más de 30 años de manera independiente siempre
guiado por nuestro Divino Creador y mi línea democrática y progresista al
servicio de Huamachuco y el Perú, mi Patria. ¡Siempre.!!!!