Uno de los afectados indicó que en el primer nivel funcionaba un taller y almacén de llantas
El hecho se produjo al promediar las 11:30 de la mañana, al parecer por un cortocircuito originado en el primer nivel donde hubo gran material inflamable y que terminó extendiéndose las lenguas de fuego al segundo y tercer piso, llegando hasta la azotea.
Labores
Personal de Seguridad Ciudadana de La Esperanza, bomberos voluntarios de Trujillo y La Rinconada llegaron para controlar las llamadas de fuego.
Un sereno tuvo que romper la puerta del segundo nivel para que los hombres de rojo puedan realizar su trabajo.
Los vecinos indicaron que en el primer piso funcionaba un taller y que habría gran cantidad de llantas de diversos vehículos.
“Estaba en el centro y me llamaron que se estaba quemando mi vivienda. En el primer piso había un almacén de llantas, parece que hubo un cortocircuito”, indicó uno de los afectados que vive en el tercer piso.
Cabe mencionar que se reportó que un vehículo que se encontraba en la cochera del inmueble quedó reducido a cenizas e inservible. (DIARIO CORREO)