La jovencita sufre de retardo mental y vivía a solas con su madre en el jirón Zepita, ubicado en el centro histórico de Trujillo.
Una joven que padece de retardo mental durmió, al menos dos días, junto al cadáver de su madre. Las mujeres vivían solas en la quinta ubicada en el lote 650 del jirón Zepita, frente al colegio Antonio Raimondi en Trujillo.
Los vecinos se dieron cuenta que hace unos días no veían Gloria Aydee Orellano Moncayo, de 65 años, y que desde su casa percibieron un fuerte olor que emanaba desde su habitación. Ellos decidieron forzar la puerta e ingresar para ver lo que sucedía.
En la habitación, hallaron a la madre muerta, y a otros pocos metros estaba su hija que, por su condición, no era consciente de la tragedia. Después del hallazgo, los policías se comunicaron con la otra hija de la víctima.
La joven contó que su madre había tenido al menos dos preinfartos. La policía presume que Gloria habría sufrido un ataque al corazón y que producto de ello cayó al suelo. Lamentablemente no hubo nadie para socorrerla.(la industria)