En coordinación con el Instituto de Defensa Legal (IDL), pobladores de las comunidades espinarenses de Alto Huancané y Huisa querellaron al Estado en demanda de atención médica especializada, al encontrarse en su mayoría con metales pesados en sus organismos desde el año 2010.
En total son tres las demandas. Una por incumplimiento de obligación, otra de tipo penal por no atender a personas en peligro y, por último, una demanda civil por indemnización en favor de víctimas que superan el centenar.
Tres comuneros que llegaron a Lima para exigir justicia dieron dramáticos testimonios sobre la situación en que viven y suplicaron al Estado que no siga dejándolos morir. Lo peor es que continúan expuestos a los mismos contaminantes.
Santosa Ñuñoncca, Melchora Surco y Juan Magaño refirieron que los planes de salud que de vez en cuando aplica el ministerio no son especializados.
Señalaron que los médicos suelen auscultarlos y luego les recetan pastillas que no pueden comprar y que además no les brindan bienestar.
"No entendemos por qué nos tratan así. Cuando era niña yo vivía feliz, saltando como las ovejitas y tomando agua dulce. ¿Por qué todo esto cambió?", lamentó Melchora Surco.(la república)