Jóvenes fueron a pescar porque no contaban con recursos económicos para comprar alimentos y fueron arrastrados por la corriente del caudaloso río, en la provincia de Pataz
Escrito por Karín Espinoza
Motivados por conseguir alimentos para subsistir en esta cuarentena, dos hermanos fueron arrastrados por el río Marañón mientras pescaban. Los familiares de los jóvenes buscan los cuerpos, con la esperanza de hallarlos con vida.
CAUDALOSO
Ante la falta de alimentos, Evaristo Domínguez Jara (22) y su hermano, Julio (17), acompañados de su amigo Gerson Rodríguez Artega (20), salieron el último sábado a las 8 a.m. a pescar al río Marañón, en el anexo de Nimpana, en el distrito andino de Pataz.
A las 10 a.m., Evaristo y Gerson al no lograr pescar en la orilla ingresaron al río; sin embargo, el caudal del también conocido como la “Serpiente de Oro” había incrementado y fueron arrastrados por la corriente. Gerson logró bracear y sujetarse de unas ramas hasta salir a la orilla del río, herido.
Julio, quien se había quedado sentado al margen del río, al ser alertado por Gerson, se lanzó a las profundidades del Marañón para buscar a su único hermano, y literalmente fue tragado por las aguas.
Raquel Hilario Ruíz, prima de los hermanos, contó que ante la cuarentena, Evaristo animó a su hermano a viajar con él desde su natal poblado de Cachipampa, Sartimbamba (Sánchez Carrión), a la casa de su pareja y madre de su hija de 3 meses, en Nimpana. “Ellos son de extrema pobreza. Trabajaban como mineros para ayudar a su papá, que ya está muy anciano, y a su mamita, que es sordomuda”, sostuvo.(CORREO)