Según el Coprosec, en el 2016 en nuestra ciudad se denunciaron 5 mil 593 robos simples y agravados, así como hurtos simples y agravados.
Una menor de edad conversa por su celular mientras abandona presurosa su centro de estudios. Antes de que se decida a cruzar la acera para abordar el vehículo que la traslade a su destino, dos sujetos a bordo de una moto lineal le arrebatan el teléfono y su cartera para huir sin remordimientos entre los oscuros pasajes de la urbanización Monserrate.
Una concurrida cebichería en Santa Isabel, ubicada a tan solo dos cuadras del Departamento de Robos de Vehículos (Deprove) es asaltada por cuatro delincuentes que irrumpen pasada la medianoche en el local para apropiarse de S/ 20 mil en dinero en efectivo, joyas, celulares y otros artículos de valor que también arrebataron a los comensales.
Hechos como los descritos parece repetirse en todos los territorios vecinales de Trujillo, solo varían sus protagonistas. Aunque el número de homicidios en la capital liberteña se ha reducido considerablemente en los últimos cinco años, la incidencia de delitos contra el patrimonio, en las modalidades de robo simple y robo agravado, así como hurto simple y hurto agravado, mantienen índices muy elevados, situación que influye directamente en la percepción que tienen los trujillanos sobre la inseguridad.
Según el reporte anual de delitos, elaborado por la región policial La Libertad y procesado por el Observatorio Provincial de Seguridad Ciudadana, en el 2016 se registraron 5,593 robos y hurtos en la provincia de Trujillo, de los cuales 3,457 se cometieron en los 59 territorios vecinales del distrito de Trujillo, un promedio diario de poco más de 15 robos o asaltos al paso o a mano armada los que fueron reportados.
Los sectores donde se registran la mayor cantidad de robos siguen siendo los mismos que se incluyeron en el mapa del delito elaborado por la Policía Nacional y actualizado cada año. En él destacan el barrio de Chicago -donde además también se registra una alta incidencia de consumo de alcohol y drogas en la vía pública-, El Alambre, El Bosque, La Noria, Santo Dominguito, y las exclusivas urbanizaciones San Andrés, La Merced, entre otras.
El informe detalla que entre los meses de abril a julio la ocurrencia de estos y otros delitos fue notoriamente mayor que en el resto del año. Ello se debió al desarrollo de actividades sociales, culturales, educativas y económicas como los eventos por la Semana Santa, apertura del año escolar, la celebración del Día de la Madre y Fiestas Patrias.(la industria)