lunes, 26 de septiembre de 2011

LA INTOLERANCIA AL PENSAMIENTO DIFERENTE




La denuncia penal realizada al Sr.Luis Alberto Flores Ledesma por la Unidad Ejecutora 007 nos revela una clara doctrina que existe una intolerancia al pensamiento diferente, este fenómeno se repite en todas la épocas, así le pasó a César Vallejo y a Ciro Alegría de quién hoy se glorían los coterráneos. Decir la verdad que uno cree y piensa tiene su precio, porque muchos son conscientes de pensar distinto a los que lideran y actúan en ciertos estamentos gubernamentales, pero no tienen la oportunidad, ni la capacidad de decirlo abiertamente. Discrepar públicamente de la forma ver el mundo de pensar es un derecho.
El fundamento de la denuncia a cualquiera convence dado que argumenta que es por una manipulación informática en forma reiterada y sistemática con actitud difamatoria. Eso puede ser verdad, si las pruebas así lo demuestran. Pero no se olvide señor director de la Unidad Ejecutora, que su misión es promover la cultura de puesta en valor de los monumentos arqueológicos, grandes tesoros históricos y no de caer en el error de atacar al que piensa distinto a Ud y a su institución. porque eso cometer abuso de poder contra el libre pensamiento y la libertad de opinión, aún más cuando el Procurador Público al referirse a Luis Albertos Flores Ledesma lo acusa de fungir de periodista dado que no tiene formación profesional para desempeñar tal profesión. Dejo sentada mi posición de respaldo a mi colega periodista en orden al libertad de expresión, por cierto en un marco ético.
Teniendo en cuenta que en Perú sobre todo en Huamachuco, el periodismo se ha construido con la experiencia, siendo así que, casi todos los periodistas son igual que Luis Alberto Flores del tipo empíricos, dado que no han estudiado, eso significaría que el día que emitan un juicio diferente a la imagen que quiere esta institución están en la lista para ser denunciados ejemplarmente.
Mi reflexión final es que las acciones y los resultados del trabajo son los mejores gestores y constructores de la verdadera imagen y reputación institucional; frente a ello nada puede hacer la opinión el pensamiento diferente de una persona individual, además se ve de mal gusto que una institución se ponga a pelear con un ciudadano. Le pedimos más tolerancia a la Unidad Ejecutora que su hidalguía se demostrará por sus resultados y no perder el tiempo en acciones menores por mas legales que sean. La buena reputación trasciende a la ley y al impacto mediático.(el nuevo halcón)