Aunque fuera admitida la moción de vacancia para su debate en el Pleno, es poco probable que se consigan los votos para destituir al mandatario Pedro Castillo, afirman expertos.
Por: Geraldine Ponce
Hasta el momento, Renovación Popular (RP) y Fuerza Popular (FP) han comunicado que apoyarán la iniciativa de la congresista de oposición, por lo que, junto a la bancada de Avanza País, ya serían tres las que firmarían el documento y, por ende, votarían a favor de la admisión a debate.
Así, Chirinos agradeció a ambas bancadas por sumarse a su pedido para destituir al mandatario y exhortó a Acción Popular (AP) y Alianza para el Progreso (APP) a que reflexionen sobre su decisión de no apoyar el pedido.
En ese sentido, el politólogo de la PUCP, Fernando Tuesta, afirma que la posibilidad de admisión de la propuesta “solamente es un tema de números”. Sin embargo, señala que, más que una vacancia, la intención de los legisladores es lograr que el jefe de Estado acuda al Parlamento para confrontar los errores que han detectado a lo largo de los poco más de 100 días de gobierno que cumple.
“Entiendo que los miembros o quienes están interesados en este tipo de interpretación de la vacancia saben que no van a llegar finalmente a vacar al presidente, pero sí han manifestado que lo quieren en el Parlamento para que confronte los cuestionamientos que hay sobre su Gobierno y su desempeño”, sostuvo en diálogo con La República.
No obstante, aunque el Legislativo desee cumplir su función fiscalizadora y confrontar a Castillo Terrones, el documento existente carece de causales aceptables para una vacancia por incapacidad moral. Anthony Medina, politólogo de UCSM, afirma que las razones expuestas y los escándalos en los que se ha podido ver envuelto el entorno de Pedro Castillo no justifican su destitución del cargo; por lo tanto, es un pedido que no triunfaría si llegara al Pleno.
“Tú puedes decir que hay muchas razones: que quieren argumentar que tiene vínculos con Sendero (Luminoso), los nombramientos irregulares que ha hecho de gente poco preparada... pero no hay un causal de incapacidad moral permanente (...) Entonces, yo creo que es algo que no va prosperar”, afirmó Medina en conversación con este diario.
Frente a ello, añadió que el Tribunal Constitucional no logró en su momento aclarar los casos en que aplicaría una vacancia por incapacidad moral permanente, por lo que los criterios que se exponen actualmente resultan gaseosos. De esta manera, abren la posibilidad de crear arbitrariedades, lo cual genera una mayor confrontación entre Ejecutivo y Legislativo.
Votos fuera de la decisión de bancada
Hasta el momento, la mayoría de bancadas del Congreso de la República ha señalado que no apoyará la moción presentada por la legisladora de Avanza País.
Perú Libre, Juntos por el Perú, Alianza para el Progreso, Somos Perú, Acción Popular y Podemos Perú se han pronunciado al respecto, rechazando cualquier acción de apoyo a la iniciativa de Chirinos.
Sin embargo, Medina sostiene que cabe en la posibilidad que parlamentarios de dichas bancadas opositoras se retracten y decidan no votar en bloque.
“La política parlamentaria es una negociación permanente (...) están constantemente negociando y en un momento se puede decir que están viendo ‘ya, ¿qué me ofreces?’. Por lo general, son cargos públicos, obras públicas, el apoyo del Gobierno para sus regiones”, precisa.
De esta manera, los congresistas indecisos o en búsqueda del cumplimiento de intereses personales son el target de los impulsores de la vacancia presidencial, según Tuesta. Así, se evidencia la completa posibilidad de que se sumen votos al momento de decidir la admisión para debatirla en el Pleno.
“Esos congresistas son los que deben estar buscando los que promueven la vacancia (...) porque esto son negociaciones políticas. Entonces muchos son porque probablemente les ofrecen algo, en el sentido de apoyarles en alguna ley”, aseveró.
Pese a la dificultad de conseguir votos para la admisión a debate, ambos politólogos no descartan que ello llegue a suceder luego de obtener los más débiles de cada bancada opositora de la iniciativa. Sin embargo, concuerdan también con que es poco probable que se concrete la destitución del mandatario, ya que la cantidad de votos requerida para ello es mucho más alta.
En dicha situación, tal como señala Anthony Medina, no solo Castillo corre un riesgo, sino también el Parlamento. Si la propuesta llegara a última instancia y fuera rechazada, el presidente saldría “fortalecido”.
“Yo creo que se están jugando algo muy serio porque si esto se somete a debate y la vacancia es rechazada, Castillo va a salir sumamente fortalecido y yo creo que ya no va a haber otra oportunidad para otra petición de vacancia. No creo que vayan a querer aventurarse nuevamente en algo así“, enfatizó.
Vacancia presidencial: ¿qué proceso se debe seguir?
Según el reglamento parlamentario, en primera instancia, se requieren al menos 26 firmas solo para presentar la moción de vacancia presidencial. Después, para que la propuesta sea admitida a debate en el pleno del Congreso, se necesitan 52 rúbricas.
Al ingresar al Legislativo, el presidente deberá apersonarse ante la representación nacional entre el tercer y décimo día de ser admitida la moción. Finalmente, para que esta sea aprobada y el mandatario sea destituido, es necesario contar con 87 votos. (LA REPÚBLICA)