El rechazo ciudadano a la lideresa fujimorista influyó en la bajísima votación de los trece postulantes a los gobiernos regionales y 73 aspirantes a las alcaldías provinciales, en algunos casos con votaciones que no llegaban a uno por ciento en sus propias zonas de influencia.
El rechazo ciudadano a la lideresa fujimorista influyó en la bajísima votación de los trece postulantes a los gobiernos regionales.
Redacción: Ángel Páez
Es probablemente una de las peores catástrofes del fujimorismo desde que participó en competencias electorales en 1990. Lanzó 73 candidatos para las alcaldías provinciales del país y solo ganó en tres: Sánchez Carrión (La Libertad), en Yauyos (Lima) y en Bolívar (La Libertad). Es decir, solo triunfó el 4 por ciento de los aspirantes de Fuerza Popular, lo que es un indicativo de que el partido de Keiko Fujimori ha perdido sintonía con sus electores.
De acuerdo con los resultados al 99 y 100 por ciento de la Oficina Nacional de Procesos Electorales, ha habido candidatos fujimoristas que ni siquiera pasaron el 1 por ciento, como Fernando Gómez Tello, que logró nada más que el 0,85 por ciento. Y otros que con las justas alcanzaron el 1,01 por ciento, como es el caso de Ritler Macahuachi Rodríguez, quien postuló para la provincia de Mariscal Castilla (Loreto), o Eduardo Urquiaga Johanson, que se presentó a la alcaldía de Cajabamba (Cajamarca).
En promedio, el candidato fujimorista obtuvo 7,7 por ciento de los votos válidos, que es muy bajo y decepcionante. Sin embargo, Diethel Columbus Murata, el aspirante a la Municipalidad Metropolitana de Lima, solo pudo captar el 2,70 por ciento de los votos.
Fuerza Popular cosechó las deplorables cifras, no obstante que la presidenta del partido viajó a distintas partes del país para apoyar a los candidatos a los gobiernos regionales y a las alcaldías provinciales y distritales. Como se verá más adelante, ninguno de los trece aspirantes a gobernador regional logró la victoria. Ninguno.
Que la lideresa se dedicó en cuerpo y alma a la campaña electoral 2018, lo declaró una de sus principales voceras, la congresista Karina Beteta, quien afirmó: “Keiko Fujimori trabaja las 24 horas en Fuerza Popular”.
Duro y con palo
La presencia de Keiko Fujimori en provincias, en lugar de representar un espaldarazo para los aspirantes de Fuerza Popular, aparentemente resultó negativa, si se toman en cuenta los resultados. El porcentaje de votos que captaron los candidatos se parece mucho al bajísimo nivel de aprobación de Keiko Fujimori.
La poca cantidad de votos que han conseguido los candidatos a las municipalidades provinciales en la jornada electoral del domingo 7 de octubre es una expresión del 82 por ciento de rechazo y del 13 por ciento de aprobación que tenía Keiko Fujimori pocos días antes de la votación, de acuerdo con una encuesta que hizo pública la compañía Ipsos.
Por esos días, el 14 de setiembre, cuando circulaban rumores de que Diethell Columbus había sido abandonado por su lideresa, y se especulaba que el verdadero candidato de Keiko Fujimori era Renzo Reggiardo, ella participó de una actuación pública en apoyo al aspirante de Fuerza Popular. Pero Columbus jamás pudo superar el 3 por ciento de la intención del voto.
Lo ciertos es que alrededor de 22 candidatos alcanzaron porcentajes similares a los de Columbus. Si los resultados de las elecciones del 7 de octubre son un anticipo de las elecciones de 2021, la jefa de Fuerza Popular debe preocuparse.
En el suelo
Pero también son extremadamente lamentables las cifras de los trece candidatos de Fuerza Popular a gobernadores regionales. Si el promedio del candidato a alcalde provincial fue de 7,7 por ciento, el aspirante fujimorista logró como promedio 4,8 por ciento de los votos válidos. Se trata de un panorama desalentador.
Con decir que la candidata al gobierno regional de Apurímac, Irma Palomino Padilla, obtuvo 0,89 por ciento: ni siquiera un punto. Pero peor estuvo el postulante fujimorista para gobernador regional de Tacna, Juvenal Villanueva Delgado, que arañó el 0,81 por ciento. Tampoco superó el uno por ciento.
Y con la justas captó el 1,34 por ciento de los votos el postulante a gobernador regional de Moquegua, Lelis Choque Núñez.
Dos de los favoritos del fujimorismo, Geanmarco Quezada Castro y Víctor Becerrill Rodríguez, que se lanzaron para gobernador regional de La Libertad y de Lambayeque, respectivamente, captaron votos para llorar de vergüenza.
Quezada, exasesor del presidente del Congreso, Daniel Salaverry, llegó solo al 8,24 por ciento. El candidato de Alianza para el Progreso (APP) lo sepultó con un contundente 32,77 por ciento.
Víctor Becerril, excongresista fujimorista y hermano del vocero de Fuerza Popular, Héctor Becerril Rodríguez, también quedó entre las patas de los caballos. Con enorme esfuerzo llegó al 6,12 por ciento de los votos, mientras que su competidor de Perú Podemos lo aplastó con un doloroso 42,03 por ciento.
Las elecciones regionales y provinciales del 7 de octubre ha sido un verdadero castigo en las urnas para el fujimorismo.
De los trece candidatos de Fuerza Popular a los gobiernos regionales, el que consiguió un mejor caudal de votos fue Jorge Hurtado Herrera, con 14,35 votos válidos. Pero fue arrasado por su competidor del grupo independiente Obras por la Modernidad, que logró el 33,19 por ciento. Hurtado quedó en cuarto lugar, incluso superado por los independientes de Unidos por la Región y Avanza País, este último fundado por el exfujimorista Julio Gagó.
Otros postulantes en los que confiaba el fujimorismo porque competían con la ventaja de encontrarse en sus zonas de influencia fueron Carlos Ginocchio Celis, por el Gobierno regional de Piura, pero se quedó muy atrás con un bajísimo 2,98 por ciento. Quedó en la octava posición, vencido por el aspirante de Región para Todos. También Máximo Cabrera Cabrera, que se lanzó como gobernador de la región San Martín. Encalló en el sexto puesto con el 5,88 por ciento, derrotado por su contrario de APP que llegó al 28,74 por ciento.
Esta vez el apoyo de Keiko Fujimori, que arrastraba el enorme fardo del rechazo popular, resultó contraproducente para los candidatos naranjas. Las cifras lo dicen todo.
Datos
- En Carhuaz, Juan Mejía Giraldo solo pudo cosechar el 1,41 por ciento; en Huaylas, Rembert Cavallos Miñán, el 2,74 por ciento; y en Huánuco, Juan Ramos Barredo, el 1,61 por ciento
- En Huancayo, Luis Torres Garay, 1,74 por ciento; en Jauja, Percy Cerrón Espinoza, el 11,93 por ciento; en Tarma, María Palpa Rojas, el 6,59 por ciento; y en Concepción, Simón Yangali Velásquez, el 13,82 por ciento. Muy lejos de los sueños fujimoristas.
Los tres únicos vencedores naranjas
- Vencieron en provincias Odar Sánchez Peche, con 38,98 por ciento, en Bolívar (La Libertad); Robert Contreras Morales, en Sánchez Carrión (La Libertad), con 30 por ciento; y Elva Dionisio Inga, en Yauyos (Lima), con, 18,44 por ciento de los votos.
- En las zonas de influencia del fujimorismo, como en la zona norte del país, los resultados también fueron adversos. En Casma, la candidata Patricia Seperack Chirinos alcanzó el 1,30 por ciento; en El Santa, Enrique Ponce Rodríguez, 3,25 por ciento; en Trujillo, Verónica Escobal Ordóñez no pasó del 5,63 por ciento; y en Chiclayo. Jaime Contreras Rivas llegó dificultosamente al 6,90 por ciento.
- La selva le dio la espalda a Fuerza Popular. En Coronel Portillo, Julio Reátegui logró nada más que 2,86 por ciento; en Maynas (Loreto), Sandro Cubas Encinas no superó el 2,63 por ciento; y en Moyobamba (San Martín), Wilson Becerra Pérez solo pudo llegar al 2,45 por ciento.
(la república)