Gerardo Jiménez Valderrama y Feliciano Avila Ramírez padres de los 2 jóvenes fallecidos en una mina del cerro el Toro en Huamachuco, acompañados de familiares y moradores del caserío de Pampa del Suro, distrito de Marcabal, se apersonaron hasta el Ministerio Público para exigir justicia sobre la muerte de sus hijos, aparentemente por asfixia, al haber inhalado gases tóxicos dentro de un socabón.
Manifiestan que los jóvenes fallecieron en una mina que está activa y no abandonada como se informara anteriormente y es extraño que una persona desconocida les ofreciese ayuda para el sepelio. Creen que sus hijos murieron por negligencia del dueño y que los cadáveres los llevaron a una mina abandonada para ocultar su responsabilidad.
De igual forma, por qué no participaron de levantamiento del cadáver y que es falso que la tercera persona identificada como Fredy Benancio Nicolás Avila, se salvó de morir y fue llevada a una clínica particular, donde averiguamos, no hay nadie que haya ingresado con ese nombre.
Actualmente, este joven que es primo de los fallecidos, se niega a colaborar con la investigación. Es el único testigo del lugar donde fallecieron sus hijos. Además uno de ellos se comunicó con sus padres y le dijo que estaban trabajando en el cerro el Toro y había trabajo.
Francisco Avila Carrión de 18 años y un adolescente de 17 de iniciales M.J.A. perdieron la vida en el cerro el Toro hace varios días que según la policía, fueron encontrados muertos en una mina abandonada.(Radio Los Andes)