viernes, 30 de octubre de 2015

Acusan a Cesar Acuña de obtener su título profesional irregularmente

CESAR ACUÑA TITULO DE INGENIERO
Por estos días, una vez más, mucho se preguntan, después de leer la publicación de la mula.pe, si Cesar Acuña sacó “título Bamba”, “con trafa” o “título con su plata” (como cancha).

El ex decano de la facultad de Ingeniería Química de la UNT, Masahiro Ywanaga Angulo, afirmó que el candidato presidencial de APP hizo “movidas bajo la mesa” para ser profesional

Aquí reproducimos la nota de la mula.pe, saque usted sus conclusiones.

Parafraseando a Steve Levitsky: de César Acuña había dudas, pero no pruebas. Hasta ahora, al candidato de Alianza para el Progreso se le había cuestionado su propia confesión de que no lee, sus cuestionables propuestas a sus electores, y hasta la forma en que construyó su imperio empresarial-académico.

Sin embargo, es bueno recordar que hace cuatro años, y sin trascender los linderos de Trujillo, el exdecano de la Facultad de Ingeniería Química de la Universidad Nacional de esta ciudad (UNT), Masahiro Ywanaga Angulo, denunció que el recientemente renunciante gobernador regional de La Libertad habría obtenido su título universitario de manera irregular.

En una entrevista concedida en agosto del 2011 a la Revista Universitas, editada por el Sindicato Unificado de Docentes de dicha casa de estudios (puede ver la entrevista completa en el documento de abajo, de las páginas 12 a la 14), y publicada por el portal de la Red Voltaire en septiembre del año pasado, Ywanaga dijo que Acuña hizo algunas “movidas” para este fin.

Revista Universitas

Tráfico de notas en la UNT

Ywanaga cuenta que entre 1989 y 1991, en los medios de comunicación de Trujillo se conoció “un escándalo de tráfico de notas, de actas, convalidaciones y titulaciones”, en la Facultad de Ingeniería de la UNT.

Por aquella época le tocó asumir como director de la Escuela de Ingeniería Química (EAP-IQ), que formaba parte de dicha Facultad. En ese momento “descubrí que había irregularidades como la desaparición sistemática de actas, por lo que muchos alumnos no podían continuar sus estudios, originándose interminables problemas de reclamos y denuncias sobre cobros y extorsiones por parte de los afectados”.

Al conocer esto, Ywanaga reveló que hizo las investigaciones del caso ypresentó las pruebas a los decanos de la Facultad de Ingeniería de la época, Fernando Neyra Bisso y Raúl García Angulo, quienes no hicieron nada al respecto.

La vida dio vueltas, e Ywanaga fue elegido decano de la Facultad de Ingeniería de la UNT. Allí descubrió que el tema no solo ocurría en la EAP-IQ, sino en Ingeniería Metalúrgica e Ingeniería Industrial. Por ello, encargó a Juan Guerrero Llúncor, director de la EAP-IQ, “que realizara una investigación exhaustiva sobre estas irregularidades”.

Todos los caminos conducen a acuña

La investigación de Guerrero Llúncor “destapó una verdadera caja de Pandora con nombres y apellidos”. Y allí es donde menciona que “el alumno César Acuña Peralta aparecía aprobando en un ciclo 48 créditos (en el año académico de 1977) en lugar de 22 que era y es lo normal. Todo un superdotado. ¡Ni Einstein!”.

El informe del director de la EAP-IQ también indicaba que varios de los documentos de Acuña “aparecían como ingresados a secretaría de la Facultaden días de huelga general indefinida”. Pese a estas irregularidades, el también exalcalde de Trujillo “fue declarado expedito para sustentar una tesis bipersonal”.

Ante ello, Ywanaga decidió no firmar el diploma del grado de bachiller de Acuña. Además, mencionó que “no recordaba haberlo visto como alumno en los ambientes de la Facultad y al revisar mis actas del curso de Operaciones Unitarias I, que sólo yo dictaba en Ingeniería, no aparecía ni como matriculado ni como asistente”.

Para esto, contó con el apoyo del doctor Pedro Castillo Bécar, quien se desempeñaba como jefe de la Oficina de Registro Técnico de la UNT, y que solicitó a Ywanaga, mediante un oficio “se le declare no expedito” a Acuña para obtener su grado académico, debido a que no se había registrado su matrícula académica y que le faltaba “el número de créditos exigidos”.

Sin embargo, el certificado de estudios de Acuña indica que tenía nota aprobatoria de 11, “gracias a una irregular Resolución Directoral de Bienestar Universitario. Es más, en sus certificados de estudios presentados, casi todos los cursos del señor Acuña aparecen aprobados gracias a la asombrosa Resolución de Bienestar de Universitario No. 0895-81″.

Comienzan las presiones

Ywanaga contó que a partir de ese momento empezaron los ofrecimientos y las presiones de todos lados, incluido el rector de entonces, Carlos Chirinos Villanueva. “No cedí. Por el contrario, mediante Resolución de Decanato declaré Nulo todo lo actuado sobre el alumno fantasma César Acuña Peralta”, manifestó.

También indicó que ante las presiones, denunció el hecho ante la prensa, con documentos en mano. A cambio de ello, “recibía diatribas e insultos mediáticos de muchos periodistas a página llena”. Al mismo tiempo, “un buen sector de la prensa hizo eco de mis declaraciones y defensa de la moral en la UNT. Además, buen número de docentes y de estudiantes me apoyaron sin condiciones”.

Mientras Ywanaga se mantuvo como autoridad en la UNT, Acuña no pudo obtener su grado. Pero luego de más de un año soportando nuevas presiones, renunció debido a que “el poder corruptor del dinero fue comprando conciencias y voluntades”. “Me fui quedando solo con mis principios y con mi lucha contra la corrupción”, agregó.

Se salió con la suya

En efecto, siete años más tarde, el rector Guillermo Gil Malca y el decano de la referida Facultad, Mario Alva Astudillo, “firmaron el grado de bachiller y el título de ingeniero fraguados de Acuña”, de quien dijo que “era un Midas que todo lo compraba y ensuciaba con dinero obtenido no se sabe de dónde”.

“El señor Acuña se salió con su gusto (…) Pero lo que nunca podrá demostrar es capacidad intelectual, menos conocimientos de ingeniería. La capacidad y los conocimientos no se pueden comprar. Basta escucharlo hablar para darse cuenta de sus graves limitaciones cognoscitivas. La pobreza de su lenguaje es alarmante y el atropello al idioma una vergüenza. El señor Acuña sabe tanto de ingeniería como un albañil de física cuántica”, finaliza Ywanaga en la entrevista.


A todo esto, ¿qué responderá el señor Acuña? ¿Dirá que se trata de un refrito, o de una campaña para bajarlo en las encuestas, ahora que ha comenzado a subir, y a revelar quiénes son sus “refuerzos”? Esperemos su respuesta.

Publicado por La mula.pe el 26 de Octubre de 2015 (trujilloinforma)