Después del gran sismo del año 1970 que se sintió en Huamachuco y algunas casas resultaron afectadas, incluso el campanario ubicado en la Plaza de Armas, la población no se encuentra preparada.
Por ser una población andina y por su misma idiosincrasia, se desconoce que hacer, antes, durante y después de un sismo.
En los últimos temblores de tierra que se han sentido, los pobladores acuden de inmediato a sus viviendas para ver a sus familiares, no respetando las orientaciones y señalización de seguridad ante un sismo.
Los simulacros escolares mayormente se cumple por obligación ante la evaluación que realiza la Ugel, faltando mayor capacitación de ellos y conciencia en docentes y alumnos de asumirlos con responsabilidad.(Beto Mendoza)