lunes, 14 de abril de 2014

Crisis en Santiago de Chuco: Turba intenta quemar sede policial

Liberación de ronderos implicados en crimen en Santiago de Chuco motivó levantamiento popular.

Tensión. Población tiene desconfianza de sus autoridades y dirigentes
Tensión. Población tiene desconfianza de sus autoridades y dirigentes

Santiago de Chuco. La evidencia de corrupción y complicidad de las rondas campesinas en el asesinato de una pareja de esposos en el caserío Pichunchuco, volvió a generar convulsión en esta ciudad andina. La violencia llegó al extremo de querer incendiar la comisaría de Santiago de Chuco, lo que obligó a los efectivos policiales a efectuar disparos al aire.

La reacción disuasiva de la Policía no pudo evitar que la multitud enardecida ingrese al local policial y saque a un dirigente de la ronda provincial, quien se encontraba refugiado allí, para luego azotarlo y pasearlo por las principales calle del pueblo.

Lo que desencadenó la violencia en la Tierra del Vate Universal César Vallejo Mendoza fue la actitud de la dirigencia de la Central Única de Rondas Campesinas, encabezada por Francisco Juárez Robles, quienes – según testigos- incumplieron con su compromiso asumido en la víspera (viernes por la noche) con la población.

Se comprometieron a investigar a los dirigentes de la ronda campesina de Pichunchuco, debido a que tenían indicios de su parcialización en la investigación del crimen a la pareja de esposos Sebastián Rebaza Gómez (52) y Esperanza Gastañadui (45). Ofrecieron convocar, al día siguiente, a la población para informar sobre los resultados de la investigación.

Sin embargo, el sábado, al promediar las 9:30 de la mañana, los dirigentes ronderiles de Pichunchuco fueron liberados por la dirigencia provincial liderada por Francisco Juárez, mientras que el presunto homicida fue entregado a la Policía para su traslado al penal El Milagro, mientras dure las investigaciones.

Esta situación provocó la ira de los familiares de las víctimas y un grupo de pobladores, quienes se agolparon en la puerta de la comisaría, donde hasta pretendieron incendiarla. Finalmente lograron sacar al dirigente provincial de la ronda Juárez Robles para golpearlo y hacerlo caminar por las calles. Lo acusaban de vendido, corrupto, cómplice y hasta desleal. Finalmente se firmaron actas de compromiso, donde la dirigencia de la Central Única de Rondas Campesinas de la Región La Libertad se comprometía a seguir investigando para descubrir la red de corrupción que existía en torno a las rondas de la provincia.(la industria)