En Huancavelica. Delincuentes “sembraron” explosivos en la carretera a Anco, en cuya comisaría trabajaban las víctimas. Dicho poblado ya no pertenece a la zona de emergencia.
DESTROZADO. Así quedó el vehículo policial. Efectivos regresaban de ofrecer seguridad a ceremonia por Día de la Bandera.
Ayacucho
Cuatro policías murieron como consecuencia de una emboscada con explosivos perpetrada por presuntos terroristas en el sector de Huaccoto, provincia de Churcampa, en Huancavelica.
El ataque se produjo poco antes de la cinco de la tarde de ayer, cuando los efectivos que prestan servicio en la comisaría de Anco se dirigían al poblado de Cosme, luego de brindar seguridad en una ceremonia por el Día de la Bandera, según informó un alto oficial de la Policía Nacional.
Los delincuentes colocaron explosivos en la carretera Churcampa-Anco, los que se activaron con el paso del vehículo policial, sin dar oportunidad de reacción a sus ocupantes. Sin embargo, uno de ellos habría opuesto resistencia disparando contra sus atacantes, según los vestigios hallados en el lugar.
La unidad de placa PL 15696 quedó destruida.
Las víctimas fueron identificadas como los suboficiales técnicos de segunda Humberto Matencio Gutiérrez, de 50 años, y Marco Antonio Cisneros Candia, de 46 años, así como los suboficiales técnicos de tercera Felimón Manuelo Landeo, de 30 años, y Edú Casas Llanco, de 25 años. Este último salió de la escuela policial apenas hace tres años, por lo que tenía poca experiencia en zonas de emergencia.
El más veterano era Matencio Gutiérrez, quien deja viuda y tres menores hijos. A su vez, Cisneros Candia era padre de dos niños.
De acuerdo a informes de inteligencia, después de constatar la muerte de los efectivos, los delincuentes terroristas se llevaron el armamento y las municiones que poseían sus víctimas.
Esos mismos narcoterroristas atacaron con disparos de armas de fuego a la patrulla que fue al rescate y luego huyeron con rumbo desconocido.
En horas de la noche, las fuerzas del orden lograron llegar hasta la zona del ataque y evacuaron los cuerpos de las cuatro víctimas hacia la comisaría de Anco, donde permanecerían hasta hoy. Luego serían entregados a sus familiares para su cristiana sepultura.
Pese a que esta zona es aún altamente riesgosa y sigue siendo parte de la ruta de los llamados “mochileros” que trasladan la droga de las mafias de narcotraficantes, esta comisaría ya no pertenece a la zona de emergencia del valle de los Ríos Ene, Apurímac y Mantaro, confirmó otra fuente policial. Precisamente, hace dos días fueron detenidos dos “mochileros” por personal de dicha sede de la PNP.(la república)