Negocios pagan medio millón de soles al año a organizaciones criminales. Pequeños comerciantes también son víctimas de esta modalidad delictiva.
El pasado 6 de mayo, el ministro del Interior, Carlos Basombrío Iglesias, informó que el porcentaje de empresas extorsionadas se había reducido en un 20%, de acuerdo a un informe del Inei.
Sin embargo, un trabajo de campo realizado por reporteros de La Industria desde hace varios meses, demuestra que las organizaciones criminales está enraizando cada vez más su accionar, a tal punto que las víctimas (empresarios, transportistas, comerciantes, fabricantes de calzado, entre otros), ya no acuden a denunciar cuando a punta de plomazos les exigen un cupo.
Impuesto al hampa
Después de pagar los arbitrios municipales y los servicios básicos, los pobladores de los distritos de La Esperanza, El Porvenir y Florencia de Mora, sobre todo los de mayores recursos económicos, saben que mensualmente tienen que destinar un pago adicional.
Hasta los propietarios de las pequeñas bodegas saben de esta “ley” y no les queda otra que desembolsar el dinero exigido que oscila entre los 30 a 50 soles al mes, caso contrario no pueden vivir en paz.
Por ejemplo, unas 300 familias del sector El Mirador, en la parte alta de La Esperanza, a las faldas del Cerro Cabras, pagan a una de las facciones de ‘La jauría’, a cambio de no desalojarlos de sus casas o robarles sus pertenencias. Para distinguir su presencia y marcar su territorio, la banda ha colocado en las rudimentarias casas, levantadas a bases de adobe, calcomanías con la cabeza de un tigre.
Pero es en el sector transporte donde se hace notar, quizás con mayor intensidad, las garras del hampa. Las empresas aparte de pagar el Seguro Obligatorio Contra Accidentes de Tránsito (Soat), se ven obligados a cancelar una “poliza” más.
Dos de estas empresas, la Horizonte Ecológico S.A y Moderno Express, que reúne a más de 200 colectivos, pagan hasta a ocho bandas delincuenciales. En sus parabrisas lucen stickers de ‘La jauría’, ‘Los malditos de El Triunfo’, ‘Los plataneros’, ‘Los ochenta’, ‘El dragón’, ‘Los tacoras’, ‘El gran marquez’ y ‘La nueva jauría’. A cada una de estas bandas, según se sabe, pagan 2 soles diarios por unidad. Los transportistas pagan cupos a todas las gavillas, caso contrario corren el riesgo de sufrir el atentado de algunas de ellas en venganza. Lo mismo ocurre con otras compañías.
De acuerdo al presidente de la Central Regional de Transporte Urbano de La Libertad (Certull), Orlando Villanueva Salvatierra, de las 14 empresas que circulan en Trujillo, 12 se han rendido a las organizaciones criminales y pagan cupos por temor a que atenten contra sus choferes o quemen sus unidades, tal como ha ocurrido anteriormente.
Cada empresa paga cerca de 3 mil soles al mes en cupos que sumadas entre todas hace un monto general de 36 mil soles cada 30 días que se desembolsa a favor de las organizaciones criminales, haciendo un total de 432 mil soles al año; es decir, casi medio millón de soles.(la industria)