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Un joven de 20 años Mario Briceño Valle, quien dejó la minería informal y se dedicaba a la construcción civil se quitó la vida ingiriendo insecticida para papas.
Según su conviviente de la misma edad, el fallecido llegó a su vivienda ubicada en el barrio 9 de Octubre en Huamachuco portando una bolsa, que luego de una supuesta discusión, en su delante tomo el veneno de un frasco de color blanco no pudiendo hacer nada para salvarlo. De inmediato se comunicó con serenazgo que lo halló cadáver.
Hasta el lugar llegó fiscalía con la policía que levantaron el cadáver y por los indicios presentados y ante la negativa de los familiares no se procedió a la necropsia.
El desafortunado obrero deja viuda y una niña de un mes de nacida, mientras que los familiares del occiso manifestaron que la causa habría sido por problemas sentimentales.(Beto Mendoza)