Ex presidente del Congreso de la República (2011-2012) y militante del partido de gobierno.
Enrique Patriau
En opinión de Daniel Abugattás, el gobierno no se encuentra aislado como piensan analistas y opositores. Sin embargo, admite que no tendría problemas en sentarse a conversar con otros líderes, si es necesario.
La huelga médica continúa. Hay un clima social tenso. Algo está haciendo mal el gobierno
El gobierno está para satisfacer las necesidades de la población, lo que no significa que sea el causante de los problemas. El trabajo que se hizo con los médicos en el periodo aprista no sirvió para resolver el tema salarial y por eso hay médicos que ganan menos que un conserje en un ministerio, o postas sin personal.
¿No le están echando demasiado la culpa al anterior gobierno?
Hay que reconocer que ciertos problemas son estructurales.
Pero ¿no es un error estar mirando siempre hacia atrás?
¿Eso de andar diciendo: ‘tú lo causaste’? Eso genera reacciones adversas.
Es un error, entonces.
Sí, definitivamente. Si salgo a decir que esto debió haberlo solucionado otro, no estoy haciendo nada, y más bien me peleo con otro partido y enervo el movimiento social.
Por eso, ¿no es mejor tender puentes a ganarse enemigos?
Yo no creo que el gobierno se los gane. Puedes tener posiciones de ministros que buscan confrontación total…
Cateriano.
Así es, y por otro lado tienes discursos que piden unidad. Hay temas que requieren la unidad de todos los peruanos. Hay que tener una lectura de lo que pasa en la calle. Cuando se pierde la conexión con la gente, se va todo al diablo.
El ministro Pedraza será interpelado. Cateriano salió ayer de una interpelación complicada.
Bien desagradable, diría yo.
Le decía, dos ministros interpelados en menos de 15 días, y una censura por votarse. Eso está diciendo algo.
Que en esos sectores, las cosas no están caminando. Las expectativas de la población son plenamente justificadas.
Y la oposición las aprovecha políticamente.
No sé si voy a ser demasiado desagradable, pero creo que la oposición política, en términos de representatividad parlamentaria, es insignificante. Más allá de que tenga la receptividad de algunos medios para llenar sus páginas, de algunos canales de televisión, no tiene ninguna conectividad con la población. La oposición no evitó la repartija, la evitó el pueblo. ¿Qué generan los discursos de Kenji o de Mulder cuando sale a ladrar? De repente estoy pecando de arrogancia, pero no tienen ninguna trascendencia, están absolutamente desconectados de la población.
Usted es el duro del gobierno.
No. Es que cuando perteneces a partidos que agonizan, tienes que salir en las primeras páginas todas las semanas. ¿Pero me preocupa como gobierno que me vayan a desestabilizar? No, que sigan con su juego. He conocido en el Congreso a lo peor de la especie humana, y dentro de eso está la política peruana. Veo a algunos partidos políticos como enfermos que hacen lo posible para no morir. Si tienen que arañar y patear, pues lo harán.
Julio Cotler dijo que este gobierno, sin operadores políticos, está arrinconado, aislado. Le insisto, ¿no es necesario buscar aliados?
Yo no percibo eso. A ver, no tengo problema en que cualquiera de nosotros, el día de mañana, se siente a conversar claramente con los líderes políticos, si es que eso solucionara algo. Sí, hay un cierto nivel de responsabilidad, hay líderes serios. Mencioné a Mulder, y si quieres llegar a un entendimiento con el APRA hablas con él, con el perdón de los demás. O con Bedoya, en el caso del PPC. O con el doctor Aguinaga en el caso del fujimorismo. ¿Pero esto es el centro del problema? Y sí tenemos operadores políticos. No hemos ganado elecciones sin tenerlos. Nadie nos ha regalado nada.
La aceptación del gobierno ha bajado notablemente.
Y probablemente seguirá bajando más, pero se están haciendo cosas importantes. Mira Beca 18.
¿Ya se anima a pedir disculpas por el caso de Nancy Obregón?
No me animo a juzgar. Yo no puedo llamar narcotraficante a Alan García porque todas las pruebas indiquen que está metido con los narcoindultos. Lo mismo pasa con Obregón, cuya situación es muy complicada. Yo me siento traicionado.
¿Por ella?
Por ella. Puse el pecho cuando todo el mundo me criticaba. Me la jugué. Creí en la amistad, en la lealtad partidaria. Si se confirma todo, será un duro golpe a esa amistad.(la república)