Por: Dionicio Mantilla León
En el hermoso crisol de la creación humana el arte aparece como un bálsamo hacedor de milagros, como el néctar agridulce que invita al sabor y al contento. Y es que el arte nacido de la mágica inspiración de seres excepcionales se convierte en una suerte de sabia bendita que nutre nuestro mundo interior y nos colma de paz. Una paz que con urgencia requerimos en estos tiempos difíciles en donde la tecnología nos atosiga, la violencia pisotea lo humano y el stress nos quita la vida de a pocos.
Con su diversidad de facetas el arte aparece como el antídoto salvador para el renacer de la humanidad. Allí están como ejemplo la pintura, el teatro, el canto, la música, el baile, la danza, entre muchos otros más. Nuestro país exhibe preciados y abundantes yacimientos artísticos y nuestra provincia no se queda al margen, allí se muestran en la vidriera de nuestro orgullo y para la admiración de paisanos y turistas nuestra riqueza artística. Riqueza en la que de manera especial aparece como crisol creativo de nuestros hermanos del campo, las danzas folklóricas y, entre ellas, la CONTRADANZA.
Hurgando en los libros de la historia la contradanza nació hace varios siglos al norte de Europa volviéndose, luego, muy popular en España. Los hispanos con la conquista entre muchos males y bondades nos trajeron esta danza. Ahora bien, de acuerdo a su origen toponímico la palabra contradanza proviene de las voces inglesas “country dance” o danza del pueblo, es decir aquella que es practicada en escenarios populares y que representa una parodia de los actos de celebración que los cortesanos y nobles organizaban en sus ambientes palaciegos antes y después de sus victorias en las contiendas bélicas de allí el uso de la espada y las exclamaciones estentóreas de triunfo.
¿Quién no se ha quedado extasiado ante la sabrosura y el mágico encanto que emana de la pegajosa melodía que como serpenteante chispa de un milenario rayo electriza y hacen moverse, cadenciosa y armoniosamente, los cuerpos de los danzarines de la CONTRADANZA? ¿Quién, entre huamachuquinos natales o de corazón, no ha sentido el electrizante son que hiere masoquistamente el alma y que como imborrable sello identifica a este indómito pueblo? Una hermosa danza que al oírla y verla nos hace amar aún más a esta tierra, así estemos cerca o lejos de ella. Una danza que al escuchar su preciosa melodía nos invita a quebrarnos en suspiros, a defenderla si alguien osa perjudicarla, pero, también, a trabajar incondicionalmente por ella.
¿Qué esta danza se practica también en otras latitudes de la Patria? Sí, se practica por ejemplo en Puno y en otras regiones del país, pero como la contradanza huamachuquina no hay ninguna. La nuestra es incomparable y, a nivel regional, se enseñorea y predomina sobre cualquiera otra como las aves cordilleranas que elegantes y orgullosas se elevan tras los rubicundos rayos del sol andino. Y es que la contradanza huamachuquina es muy antigua, sus albores datan de las épocas virreinal y emancipista según como lo consigna el historiador Nicolás Rebaza Cueto en su obra: “Anales del Departamento de La Libertad” (Página 283):”La fiesta fue esplendida;…El General Córdova, fue uno de los más entusiastas en el baile y el que puso la primera contradanza, que era entonces el baile oficial” (Mayo de 1824-Fiesta de despedida que los huamachuquinos ofrecieron al Ejército Libertador antes de marchar hacia Junín y Ayacucho).
La contradanza si bien fue traída por los hispanos, ha sido enriquecida a lo largo del tiempo por los huamachuquinos convirtiéndola en suya e incrementando así su abundante bagaje de danzas folklóricas de las cuales este digno pueblo, que tanto ha aportado a la cultura y el desarrollo de la Patria, se siente orgulloso. La contradanza huamachuquina trasmite sentimiento puro, belleza, elegancia, virilidad, habilidad y gracia. En suma la contradanza huamachuquina es tuya, mía, nuestra, vuestra y de todos aquellos que aman el arte y al pueblo que es su fuente y del que se nutre todos los días.
El próximo domingo, cuando el sol andino acaricie nuevamente la acrisolada cuna de Sánchez Carrión, funcionarios del Ministerio de Cultura en ceremonia pública a llevarse a cabo en la Plaza de Armas harán entrega a nuestras autoridades municipales y al digno pueblo de Huamachuco la Resolución Ministerial por la que se reconoce oficialmente a la CONTRADANZA como creación huamachuquina y como “Patrimonio Cultural de la Nación”.