Por: César Lévano
Roque Benavides, presidente ejecutivo de Yanacocha, la empresa minera asociada con la estadounidense Newmont Mining para explotar Conga, reconoció el martes que el Estudio de Impacto Ambiental aprobado por su amigo y compañero Alan García necesita cambios.
Benavides se apoya ahora en el peritaje realizado por técnicos contratados por Óscar Valdés, presidente del Consejo de Ministros.
El empresario dice que Conga se va a iniciar con obras que aumenten los recursos hídricos para Cajamarca y que se van a respetar dos lagunas que antes se pretendía secar y convertir en depósito de desechos.
Esto confirma que cuando el Presidente Ollanta Humala dijo: “Conga va” había mucho pan que rebanar.
El anuncio de Benavides es extraoficial. El empresario promete plasmarlo más adelante. “La empresa sabrá cuándo es el momento de hacer los anuncios que tenga que hacer”, expresó.
Habrá que esperar para ver en qué consiste la nueva fórmula de Conga y hasta qué punto esta se acomoda con la preservación del medio ambiente.
Entretanto, ha surgido la posibilidad de que Gregorio Santos, presidente regional de Cajamarca, se entreviste con el primer mandatario o el Comité de crisis que el Ejecutivo ha instalado. En todo caso, la idea de diálogo y no represión parece abrirse paso.
Pero hay escollos en el camino. Por lo pronto, algunas acciones dirigidas por Santos y su comando dañan la causa del pueblo de Cajamarca. Esa marcha de embarazadas en que algunas estudiantes se fingen encinta colocándose trapos en el vientre es de pésimo gusto.
Un episodio condenable es la agresión contra el ingeniero alemán Reinhard Seifert, que trabaja hace años en la región y ha sido firme y serio defensor de los derechos de Cajamarca. Seifert estaba ocupado en estos días en realizar un estudio comparativo de los diversos estudios ambientales sobre Conga.
Seifert es una de las personas que opinaron que el paro acordado en Cajamarca no debía ser indefinido. ¿Es ésta la causa de que lo hayan insultado y agredido físicamente?
Los dirigentes de Cajamarca tienen el deber de esclarecer estos hechos y de orientar contra desbordes que en nada favorecen a la causa popular y que, en el fondo, desacreditan a la izquierda en su conjunto.
Cabe destacar que el 7 de junio último, el Tribunal Constitucional, tras un examen específico del caso Conga, estableció estas pautas para la constitucionalidad de las inversiones:
“i) prevención de conflictos y de posibles daños que pueda generar determinada inversión en recursos naturales; ii) fiscalización estatal de la actividad privada a fin de determinar si cumple con los estándares nacionales e internacionales de protección; iii) reparaciones integrales en caso de afectación a la población; y, iv) concretización del principio de co-participación de la riqueza (artículo 66° de la Constitución)”. (la primera)