OJOS VENDADOS | Las autoridades de Arequipa se esforzaron para que el Rey de España evitara presenciar momentos “desagradables”, como las protestas ciudadanas, aunque eso implicara cerrar todo el centro histórico, generar un tráfico infernal y obligar al cierre de negocios debido al descomunal resguardo policial que impedía el libre tránsito.
Durante la solemne sesión inaugural del X Congreso Internacional de la Lengua Española (CILE), el rey Felipe VI agradeció la hospitalidad arequipeña y destacó que el idioma español debe servir para comunicar y no “discurrir por caminos equivocados”.
Sin embargo, a apenas dos cuadras del evento, manifestantes se concentraron para rechazar el excesivo operativo de seguridad y expresar su respaldo a la anunciada marcha nacional contra el Congreso y el Gobierno de José Jerí. ().