Pedro Pablo Kuczynski, Nadine Heredia y Jaime Saavedra tuvieron protagonismo durante este año.
Pedro Pablo Kuczynski
A los 78 años, Pedro Pablo Kuczynski tuvo el año más agitado de su vida. El peruano de descendencia alemana-polaca-franco-suiza inició enero como el tercer favorito para ganar el sillón presidencial. Los siguientes tres meses fueron un vaivén entre el tercer, cuarto y segundo lugar, en una de las elecciones más reñidas de los últimos años.
La primera mitad del año, la antesala de las elecciones, fue un ring de box donde PPK, más que proponer, logró sobrevivir. Con dos candidatos fuera de la carrera, llegó a la segunda vuelta para encontrarse con Keiko Fujimori.
Cuando la mayoría de peruanos lo consideraba perdedor, una frase le dio un envión. “Tú no has cambiado, pelona”, le dijo durante un debate a la candidata de Fuerza Popular, en relación al pasado oscuro que carga el fujimorismo. Se trató de un pullazo directo en la intención de voto.
Siete días después, PPK fue elegido presidente.
En un video emitido días después, Keiko Fujimori aceptó que perdió la elección, pero nunca una derrota suya tuvo tanto sabor a victoria. Atrás de ella, setenta y tres congresistas fujimoristas electos la acompañaban. Era un mensaje silencioso de que en los próximos cinco años la oposición no perdonaría. Y así fue.
La luna de miel que acompaña a los mandatarios durante sus primeros días en el gobierno actual apenas duró. Tras asumir el mando, el 28 de julio, PPK pasó sus primeras pruebas, enfrentando conflictos mineros, como el de Las Bambas, y los escándalos de sus asesores (Carlos Moreno, Jorge Villacorta, José Labán). Un ministro renunció por una cuestión amorosa y otro fue censurado por la bancada naranja, a pesar de una marcha ciudadana de apoyo descomunal.
PPK termina el año con poco más de la mitad del país apoyándolo y con una tendencia a la baja. Además de la inseguridad, la corrupción y la oposición, se le presentaron problemas dentro de su propia bancada. Por ahora ha sorteado la mayoría de obstáculos con una robótica sonrisa, pero van solo seis meses. ¿Le bastará?
Nadine Heredia
Escándalos, investigaciones, denuncias, amenazas, viajes frustrados: un año complicado para la ex primera dama peruana. Este 2016, la Fiscalía formalizó una investigación en su contra por presunto delito de lavado de activos por el caso de los aportes al nacionalismo, en las campañas de 2006 y 2011. Además, el Congreso la investiga por supuesta intromisión en actos de gobierno. En medio de todo, Nadine logró ser contratada como directora de enlace de la FAO, en Ginebra, lo que fue interpretado por sus detractores como un intento de evadir a la Justicia. La situación actual de la ex primera dama aún es incierta, pues el Poder Judicial dejó al voto el pedido de ordenar prisión preventiva contra ella.
Jaime Saavedra
Todos lo querían. Empezó el año con un alto respaldo. Los principales líderes políticos apoyaban su gestión al frente del Ministerio de Educación y fue el único ministro de Ollanta Humala ratificado por el presidente Pedro Pablo Kuczynski. Hace unos días, terminó su gestión abruptamente, con una censura del Congreso. Después de tres años y dos meses convertido en uno de los gestores de la reforma educativa, terminó siendo el blanco de denuncias en la prensa y críticas del fujimorismo por casos de presunta corrupción en la compra de computadoras y falta de diligencia en la administración pública.(Perú 21)