El local que hace años funcionaba el correo, ahora Serpost , es un peligro para los transeúntes que a diario pasan por este lugar, sin que las autoridades bajo su responsabilidad hagan algo por derribarla.
Esta vieja construcción cuyo techo se cayó de a pocos y que en una oportunidad la Municipalidad Provincial lo derribó, debe ser puesta en emergencia a fin de tumbarla sin que los propietarios tengan derecho a reclamo o que el Ministerio de Cultura a través del INC ponga alguna objeción.
(Beto Mendoza)