Un testigo indica a la Policía que las víctimas eran amenazadas debido a que cargaban mineral en bruto de tierras ajenas en el distrito de Quiruvilca y habrían tenido un litigio con una concesionaria de la venta de mineral en la sierra de La Libertad
Escrito por Karín Espinoza
Las investigaciones policiales empiezan a dilucidar el móvil del crimen a cinco hombres, perpetrado en los cañaverales ubicados en el Km. 11.5 de la carretera de penetración a la sierra liberteña, en el sector Bambas II, en el distrito de Laredo. Los indicios estarían asociados a la minería ilegal, por litigio que sostenían las víctimas con una concesionaria dedicada a la venta de mineral.
¿CÓMO PASARON?
Insólitamente, el volquete en el que se trasladaban las cinco víctimas con un cargamento de 30 toneladas de oro por procesar, desde el distrito de Quiruvilca (Santiago de Chuco) con dirección al almacén G&S, en el distrito de La Esperanza (Trujillo), fue intervenido en dos garitas de control policial. Ello luego de una alerta de dos sujetos sospechosos armados y pese a la aparente ilegalidad del cargamento, sin embargo, se permitió que continúen con su trayecto.
Entonces, los ocupantes del volquete continuaron, al parecer junto a sus verdugos, quienes los habrían hecho caminar aproximadamente 500 metros hacia los cañaverales. Aquí los habrían obligado a despojarse de sus correas, camisas y polos, con la cuales les ataron las manos y los obligaron a recostarse en posición decúbito ventral, al costado de un canal de regadío, en donde finalmente los ejecutaron de un disparo en la cabeza a cada uno de ellos.
“Es materia de investigación dilucidar en qué circunstancias fue intervenido, por qué fue intervenido, cuál fue el accionar del personal policial que intervino y también de los actores materia de la intervención y por qué se les dejó continuar con su trayecto y qué fue lo que asumieron las bases intervenidas”, dijo el jefe de la Tercera Macro Región Policial La Libertad, Lucas Núñez Córdova.
Según el titular de la Gerencia Regional de Energía y Minas de La Libertad, Raúl Araya, solo Pedro Orlando Ponce Varela (42), uno de los cinco hombres ejecutados el último miércoles, se encontraba inscrito en el proceso de formalización.
“Está inscrito desde 2017. Es una costumbre en ellos acompañar el transporte del mineral. Este debe haberlo extraído de Cajabamba, pero eso lo determinarán las investigaciones”, sostuvo.
Según fuentes de inteligencia de la Policía, a las 5:30 a.m. del último miércoles, se reportó una denuncia relacionada con el caso y que permitiría esclarecer el hecho de sangre.
Delci Genoveva V.C. (41) informó a los efectivos que el 14 de enero, a la 2:30 a.m., su hermano Bilmer la llamó para comunicarle que el volquete de su propiedad, de placa de rodaje BBP-801, había sido intervenido en la Comisaría de Shorey, debido a que dos hombres que se presentaron como agentes de seguridad de una empresa querían comprar el mineral que se transportaba en este.
Minutos después, Bilmer volvió a llamar a su hermana, refiriéndole que ya se encontraba camino a Trujillo junto a uno de los dos hombres, quien portaba un arma de fuego y que detrás del volquete los escoltaba una camioneta con varias personas a bordo.
Ante ello, le solicitó se comunicara con la Comisaría de Quirihuac, a fin de que intervengan a dicho hombre, razón por la que acudió a dicha delegación policial. En otra llamada, su hermano le dice que tenga cuidado porque estas personas serían enviados por “la familia Sánchez Paredes”.
Ante la denuncia, un efectivo de esta comisaría al advertirle que el vehículo se encontraba estacionado a unos metros del local policial, intervino al presunto hombre, identificado como Iker Isaac Navarro Cáceres. Sin embargo, durante el registro, no se le encontró la referida arma de fuego y se permitió que continúen con el trayecto.
Bilmer volvió a comunicar a su hermana que en el camión se fueron sus empleados, Timoteo Sandoval Flores (chófer) y Joel Sandoval Flores (ayudante); el propietario del mineral, Pedro Orlando Ponce Varela (42), y su hijo Henry Orlando Ponce Ventura (22) y Gerson Alexander Cruz Márquez (26), quienes horas después fueron hallados muertos.
El miércoles 15 de enero, a la 1:30 de la madrugada, el dueño del volquete llamó a Delci para informarle que el propietario del mineral ni el chofer le respondían y que acudiera hasta el corralón de G&S, donde se dejaría la carga de mineral; pero al ir no encontró el vehículo, el mismo que luego fue encontrado abandonado en el sector La Agüita, estacionado con las luces encendidas, el motor encendido, una llanta baja y la gata puesta. Solicitó el apoyo policial.
En tal sentido, el titular regional de Energía y Minas advirtió que las víctimas se encontraban en proceso de formalización en el distrito de Cachachi, Cajabamba, Cajamarca. “La investigación determinará si es que de esa zona han estado trayendo el mineral”, dijo.(DIARIO CORREO)