Por: Dionicio Mantilla León
Estamos en el mes de Julio y la “Fiel e Ilustre ciudad” de Huamachuco ha concluido una importante escenificación histórica que tiene que ver con la conmemoración de la epopéyica batalla del 10 de Julio DE 1883. Un magno evento que tuvo lugar en el mismo escenario donde se llevara a cabo tal acontecimiento heroico. En esta oportunidad el evento fue protagonizado por cientos de pobladores huamachuquinos y huamachuquinas, así como, también, por dos centenares de hermanos campesinos de la vecina provincia de Santiago de Chuco.
Organizado por un equipo de distinguidas personalidades entre ellas el Jefe del B.I.M. 323 Oscar de la Barrera, Teniente Coronel EP. José Luis Azabache; el ex Sub Prefecto, Prof. Julio Lozano y el escritor, Luis Peña Rebaza, concitó la expectativa de la misma ciudadanía huamachuquina, así como de cientos de turistas por la temática histórica abordada, la responsabilidad de los participantes, la acertada organización, así como el entusiasmo y hospitalidad reconocida de la población encabezada por sus autoridades provinciales.
Es de esta manera, como Huamachuco exhibió ante la nación y el mundo, un dramático pasaje de su historial en defensa de la soberanía nacional, enriqueciendo así el acendrado amor a la patria herida por la ambición extranjera y convirtiendo la escenificación en un libro vivencial abierto de par en par al conocimiento histórico por parte de las generaciones de niños y jóvenes.
La escenificación de la batalla del 10 de Julio se convierte, asimismo, en un rico filón del turismo histórico de Huamachuco añadido a otros pasajes de su historia trascendentes como la escenificación realizada por los moradores del barrio de Mariscal de Orbegoso, (Con la entusiasta y laboriosa organización y participación de maestros y estudiantes del Colegio “César vallejo”) quienes presentan el “Origen de los Wamachucos” utilizando los escarpados escenarios geográficos del sector Cruz de la Bendición. Un evento que también concita la expectativa y admiración y tiene lugar el día 10 de agosto de cada año. Años atrás, y por motivos ya conocidos, se escenificaba también el denominado Waman Raymi (fiesta del halcón) en la explanada de la ciudadela prehispánica de Wiracochapampa que congregaba a miles de turistas.
Algo más, el próximo 29 de este mes, otro acontecimiento que tiene que ver también con el pasado histórico de nuestra ciudad lo constituye la “Parada del Gallardete” señal de inicio de inicio de la tradicional festividad en honor a la Virgen de Alta Gracia, pero también poseyendo otras connotaciones como lo ecológico y lo histórico. En cuanto a esto último porque el 15 de agosto, fecha central de la festividad, se recuerda la fundación de la ciudad de Huamachuco por los sacerdotes españoles de la “Orden de los Agustinos”, un 15 de agosto de 1553, significando que en esta oportunidad recordará los 456 años de su fundación.
Y así a esto le agregamos la existencia misma de nuestra ciudad que, como siempre hemos sostenido, constituye un testimonio fiel y vivo de la historia con sus ciclópeos monumentos arqueológicos de Markawamachuco, Wiracochapampa, Cerro Sazón, Cerro Miraflores, el camino del Inca (Kapac Ñan), y, de otro lado, la Torre del Campanario, la llanura de Purrumpampa (escenario de la batalla del 10 de julio), la Casa de Sánchez Carrión, la Casa de Arcos, la casa de Julio Chiriboga Vera, las numerosas casonas coloniales y de inicios de la República de su centro histórico, la misma hermosa y extensa Plaza de Armas que fuera escenario del ceremonial de sumisión del gobernante del Señorío de los Wuamachucus, Tauricuxi ante el ejército pre inca de Túpac Inca Yupanqui, podemos decir sin temor a equivocarnos que la ciudad de Huamachuco, es de por sí, un emporio turístico de primer orden de la historia de nuestra nación.
Estas son las razones para considerar a la ciudad de Huamachuco, con mucho orgullo, como una ciudad sagrada a la que los huamachuquinos, natales y de corazón, debemos exteriorizar nuestra profunda admiración, respeto y reverencia asumiendo el compromiso, junto a las autoridades municipales, de contribuir a su cuidado, limpieza y buena presentación lo que redundará en su fortalecimiento como ciudad histórica y, por ende, como un atractivo turístico importante a nivel nacional, pero también cuidando nuestro comportamiento personal dentro y fuera de Huamachuco para no dañar su buen nombre.