En su discurso, actuaban como si estuvieran hablando con su agresor, lloraban y gritaban aterradas "por favor, no".
Siguiendo con las intervenciones que se realizaron en la marcha nacional "Ni una menos" en Trujillo, se dramatizó cómo las mujeres que soportan y callan el maltrato son sus propias verdugas.
Así, dos chicas vestidas con capas negras, estaban maquilladas representando los golpes y rasguños que reciben las mujeres que son agredidas y arrastraban una pequeña "carroza" en representación de un féretro.
En su discurso, actuaban como si estuvieran hablando con su agresor, lloraban y gritaban aterradas "por favor, no".
Además, en su dramatización, le decían a su agresor que lo denunciarían y luego, se señalaban diciendo "por callar, terminé así, haciendo referencia al "féretro" .(correo)