TODO EMPEZÓ CUANDO ESTUDIABAN EN COLEGIO DE LA ESPERANZA.
Wilder Baltodano Miranda (42) era su profesor de Matemática y empezó a seducirlas. Las menores de 17 y 15 años, son hermanas.
Tiene apenas 17 años y ya carga sobre sus hombros la gran responsabilidad que conlleva ser madre soltera. Sus maltratadas manos son las muestras palpables que desnudan las agotadoras labores que R.R.P realiza para poder alimentar a su pequeña hija de 8 meses de edad, a su madre de 48 años y a su hermana de 15, quien al igual que ella, también alumbrará un hijo en medio de condiciones de extrema pobreza.
Ambas adolescentes, quienes aún experimentan los cambios físicos y hormonales propios de la edad, fueron víctimas de la seducción, engaño (y una de ellas de una presunta violación), de parte de un mal profesor que les triplica la edad y experiencia.
Wilder Valdemar Baltodano Miranda (42). Grábese ese nombre. Este mal docente sedujo a ambas adolescentes, les hizo falsas promesas de amor, y luego sostuvo intimidad con ellas desde cuando ambas tenían 15 y 13 años respectivamente y cursaban el tercero y primer grado de educación secundaria.
Por si fuera poco, la menor de 17 años, R.R.P, quedó embarazada del sujeto, de quien alumbró a una menor de 8 meses y su hermana G.R.P, de solo 15, se encuentra con nueve meses de gestación, también del mismo hombre. Así lo denunció ayer la mayor de las agraviadas ante la Defensoría Municipal del Niño y Adolescente (Demuna) de La Esperanza.
Así sucedió
El drama de las menores comenzó en el año 2009 cuando R.R.P, estudiaba en el colegio particular Progreso del distrito esperancino. Wilder Baltodano era su profesor de matemática, quien se mostraba muy amable y atento con la menor.
“Salíamos a la hora de salida con él y otro profesor. Un día me preguntó si me dejaban salir en las tardes, me dijo que quería conversar conmigo. Desde esa fecha iniciamos una relación hasta el año pasado que yo quedé embarazada”, contó la menor.
Las malas calificaciones de su hermana menor en el curso de matemática motivaron a R.R.P. a llevarla ante su pareja para que la afiance con algunos ejercicios. Sin embargo, jamás pensó que el docente terminaría seduciendo y forzando a la menor a sostener relaciones sexuales con él.
“En mayo del 2010, empezó a seducir a mi hermana. Ella estaba mal en el curso y yo la envié para que el profesor le dicte unas clases de afianzamiento. Él me dijo luego de un tiempo que ya no quería nada conmigo y que estaba con mi hermana, que la había llevado a su casa y que habían sostenido relaciones. Me sentí muy mal, luego me dijo que ya no la iba a buscar pero me mintió”, prosigue con el escalofriante relato.
Pero sin importarle el daño físico, emocional y psicológico que causaba en ambas adolescentes, Baltodano Miranda, siguió mintiendo a ambas hermanas diciéndoles que no tenía nada formal con ellas.(la industria)